ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Alcoholismo


Enviado por   •  27 de Noviembre de 2012  •  2.205 Palabras (9 Páginas)  •  251 Visitas

Página 1 de 9

El alcohol un problema de salud

Introducción

En el presente estudio, me propongo exponer cómo es que en muchos países el problema del alcoholismo se incrementa día con día, afectando así el desempeño de las personas en sus labores diarias. Primeramente se mencionarán algunas causas y consecuencias del consumo excesivo del alcohol, así como los factores que originan dicho problema. En segundo lugar se describirán algunos de los riesgos que se asocian con el consumo de ésta droga, asimismo distinguiendo lo que es la sobriedad. Finalmente se explicará cómo repercute el alcohol en una persona, tomando como ejemplo a los estudiantes.

Debido a esto, durante las últimas décadas la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros organismos internacionales han dado voces de alarma que no han sido desoídas y que obligan a emprender acciones preventivas, terapéuticas y de rehabilitación. El consumo del alcohol es muy común en el mundo, aunque implica un riesgo para la salud y consecuencias sociales relacionadas con sus propiedades de intoxicación, tóxicas y de creación de dependencia. Es el principal factor de riesgo de las enfermedades en los países en desarrollo con baja mortalidad y el tercero los desarrollados. El alcohol es una de las drogas que por su fácil acceso y la poderosa propaganda que recibe, se ha convertido en un verdadero problema social en casi todos los países y en todas las edades a partir de la adolescencia.

Por lo que se refiere a la importancia de ésta investigación, se podrán tomar en cuenta diversos factores a consecuencia del alcoholismo, para así hacer conciencia de este gran problema a nivel social.

Por lo que se refiere a los estudios ya realizados, el alcoholismo ha pasado a ser definido recientemente, y quizá de forma más acertada, como una enfermedad compleja en sí, con todas sus consecuencias, que se desarrolla a lo largo de años, siendo así una condición verdaderamente cruel, que si se le deja avanzar puede causar estragos en el cuerpo y arruinar la situación social de la persona.

En este siglo, gracias principalmente a las enseñanzas de especialistas en salud mental y a la cruzada entusiasta de los miembros de Alcohólicos Anónimos (conocidos como “AA”), las personas cuyo beber exagerado, da oportunidad a comportamiento perjudicial para sí mismas y para los demás, son consideradas simplemente como enfermas.

I. Consumo excesivo de alcohol

1. El alcoholismo no tiene sentido.

Además de ser un trastorno devastador, el alcoholismo es desconcertante. Mucha gente no se da cuenta de que padece esta enfermedad hasta que casi es demasiado tarde para hacer algo al respecto. Lo común es ignorar lo que el alcoholismo nos ha hecho y la manera en la que ha afectado a las personas que nos rodean.

Difícilmente podremos entender por qué algunas personas beben mucho si no tenemos presente que el alcohol es una droga que, al menos durante un lapso, es capaz de disminuir (o suprimir) los más variados sentimientos desagradables, en particular, la angustia y la depresión. “El bebedor puede padecer un sentimiento crónico de frustración, de inseguridad o de vacío vital al cual “domina” con el alcohol.” (Fernández, 1988: 17).

Para muchos alcohólicos es un problema que se presenta y desaparece una y otra vez; no todos los días beben ni todos los días que beben terminan ebrios o metidos en algún problema. Si bien es cierto que un alcohólico consuetudinario empieza con una copa, sería erróneo afirmar que una copa desencadena necesariamente un episodio desastroso.

Los alcohólicos pierden el control de sí mismos, al no practicar la moderación, los alcohólicos convierten a sus amigos en enemigos y se colocan ellos mismos en situaciones desventajosas en lo personal y en lo profesional.

Considerando todo lo que puede pasarle a una persona que está fuera de control, sería un autoengaño pensar que las pérdidas ocasionales del mismo por tomar excesivamente, son simplemente una diversión inofensiva. Tales episodios pueden costarnos el respeto por nosotros mismos e incluso la vida. (Wallace, 1990).

Es indispensable que los alcohólicos entiendan que deben mantenerse lejos del alcohol en cualquier forma o cantidad, no porque vayan a embriagarse inmediatamente con una copa, sino porque lo más probable es que esto no suceda, ésta es una de las muchas razones por las que se dice a menudo que esta enfermedad es insidiosa. Debido a la naturaleza ocasional de su forma de beber, raras veces son realistas ante su problema.

Los alcohólicos que beben todos los días desarrollan niveles tan elevados de tolerancia fisiológica a la droga, que aun cuando los niveles de alcohol en su sangre estén muy elevados, no manifiestan alteraciones en su comportamiento.

Con frecuencia, el daño que se hacen es interno, puesto que el alcohol afecta y destruye sistemáticamente los principales órganos del cuerpo. Este tipo de alcoholismo es, sin duda, una enfermedad maligna que destruye silenciosamente a sus víctimas sin que éstas se percaten de lo que está sucediendo.

El beber en exceso no es en sí mismo bueno. El alcohol es una droga peligrosa, y los grandes bebedores se encuentran en riesgo de sufrir lesiones y enfermedades relacionadas con él.

Si bien cualquier pérdida del control de nuestra manera de beber y de nuestra conducta cuando estamos ebrios es seria, la pérdida del control consistente y recurrente es una señal amenazadora. (Collins, 2009)

2. Influencia en la sociedad

Uno de los caminos más prometedores en lo que se refiere a la patogenia del alcoholismo es precisamente el estudio de los factores socio genéticos que favorecen su desarrollo. Numerosos estudios señalan algunos hechos que, indudablemente, afectan la incidencia o la ausencia del alcoholismo en los diferentes grupos sociales, regiones y naciones.

Las investigaciones más dignas de crédito de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), indican que los grupos sociales con menos índice de alcoholismo tienen las siguientes características: desde pequeños, los niños ingieren bebidas alcohólicas pero en poca cantidad, muy diluidas y siempre dentro de un grupo familiar unido. Por lo general se consumen bebidas de bajo contenido alcohólico. Las bebidas se consideran alimentos y se consumen comúnmente con las comidas. Los padres son ejemplos de bebedores moderados. Las bebidas alcohólicas no tienen ningún valor subjetivo, es decir, ingerirlas no es virtuoso ni vergonzoso y no prueba que el bebedor sea más viril. La abstinencia es una actitud socialmente aceptable. En cambio, no es socialmente aceptable beber en exceso e intoxicarse.

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (14 Kb)
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com