La Juventud crese

Nos encontramos en un chile desconforme, donde las apariencias están en último lugar, utilizando la violencia para imponer su soberanía.

Podemos observar en aspectos simples como los chilenos, aparentan una vida estable y ser sustentables con el objetivo de no ser víctimas de discriminación y marginación debido a sus falencias económicas, educativas y sociales. Esto se debe a que no estamos en un país equitativo, no es fácil alcanzar un ideal de vida, por ejemplo esto se aplica a las familias vulnerables que en vez de de mejorar su calidad de vida con las condiciones básicas como; vivienda, suministros energéticos, educación ,etc.estos priorizan banalidades como la vestimenta, electrodomésticos costosos, vehículos, electrónica entre otros. Esto se debe al pensamiento altanero y reprimido de no aceptar la realidad en la que viven.

En chile se aprueba la violencia con el objetivo de callar y contener los reclamos del pueblo que sufre las consecuencias del grave padecimiento que su nación enfrenta uno de los síntomas más molestos es la imparcialidad e injusticias a las cuales nos vemos sometidos. La aprobación de la violencia se ve clarificada en las torturas que deben enfrentar nuestros defensores de la paz y seguridad,

¿De qué manera esperamos que estos sujetos no traten a los jóvenes en disturbios de manera excesivamente violenta, si a ellos se les entrena de tal manera que se ven vulnerados sus propios derechos?

Realmente la única respuesta es que “por la razón o la fuerza” toma lamentablemente a un sentido en la sociedad contemporánea, es un hecho de irresponsabilidad ya que este mensaje se transmite a los menores no dejando un muy buen ejemplo o ni buena imagen respecto a sus autoridades.

La juventud crese con estas imágenes en su memoria, creando un resentimiento frente a los que en teoría “preservan la paz y seguridad de nuestra sociedad”. Claramente este es uno de los detonantes de la actual “dolencia” que aqueja a chile.

A pesar de ser un país católico donde; la familia, el amor, los valores, el respeto y la fe, debiesen ser pan de cada día, pero cada vez vemos que estos no llegan a ser practicados. Chile es un país de apariencias donde se preserva sus faltas bajo un velo de armonía, podemos contemplar como la iglesia católica dispersa y baja el tono a las faltas que cometen sus emisarios, pasando a llevar los derechos humanos y sobre todo los de los niños, donde la violación, el estupro y el abuso nos son juzgados de manera igualitaria si no a través de indultos canónicos donde estos abusadores quedan impunes.

Actualmente la frivolidad se apodera del subconsciente colectivo, en el cual las autoridades manejan al pueblo, manipulando su pensamientos a través de los medios de comunicación, ya que podemos observar claramente que estos ya no cumplen con el objetivo de informar

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