Reflexion

Reflexión.

La enseñanza como tal es un proceso laborioso para los docentes, ya que es necesario investigar contenidos, estrategias y considerar las sugerencias de los programas actuales.

El aprendizaje también es un largo proceso por el cual los alumnos y simultáneamente nosotros mismos atravesamos con ellos, para lo cual son necesarias conocer y considerar muchas cuestiones que se ponen en juego como la atención, los diversos estilos de aprendizaje, los gustos e intereses de los alumnos, entre otras cosas.

Actualmente atiendo el grupo de primer año, así que trabajamos con la asignatura de Exploración de la Naturaleza y la Sociedad, en la cual se trabajan contenidos muy cercanos a las vivencias de los niños, en cuanto a su contexto escolar, a su núcleo familiar, en la cual se trata de trabajar con actividades dinámicas, que hagan recordar y reconocer a los aspectos más importantes de su vida para poder después con el paso de los cursos colocarse en una parte de la historia y aunque parezcan simples los contenidos que se trabajan en este ciclo son muy importantes

En particular considero que la asignatura de Historia no es vista con la debida importancia, y desde mi opinión particular es un tanto cargada, ya que además de ser contenidos que se deben aprehender en un lapso corto de tiempo parecen ser situaciones un tanto ajenas a las vivencias actuales, por lo cual es necesario que como docentes primeramente veamos y entendamos las situaciones actuales como consecuencia de algunos actos del pasado para poder lograr que los niños comprendan la importancia de ésta asignatura.

Desde mi experiencia puedo decir que el aprendizaje de la historia fue un tanto tedioso, aburrido y con poco significado, de hecho puedo decir que las clases de historia que recuerdo son las de mi maestra de quinto grado y estudiábamos la historia de México, de la cual recuerdo que se esforzaba haciendo dibujos en el pizarrón, para representarnos algunos hechos, pero lo que más me gustaba era la forma en la que se esmeraba en explicarlo e infiero que la asignatura era de su agrado porque conocía el tema, pero se debe tomar en cuenta la forma en la que los alumnos aprenden, en mi caso comprendo los hechos históricos si me los explican o si los veo por ejemplo en una película o mediante dibujos para mí la enseñanza de historia por parte de esa maestra fue un poco significativa, tal vez faltaron ejercicios extras que ayudaran a reforzar lo aprendido mediante sus explicaciones. De igual forma recuerdo la enseñanza de la ésta materia por parte de mi maestro de preparatoria y de hecho tenían mucha semejanza, pero a la vez él nos pedía realizar consultas respecto al tema, lectura y explicación de la misma.

Por lo anterior he comprendido que para la enseñanza de la historia es necesario leer, analizar y comprender para poder explicar, pero no solamente un hecho, sino también el porqué sucedió y la trascendencia que pudo hacer tenido, además tener en cuenta las formas en las que aprenden los diversos niños, ya que hablamos que los grupos de primaria, que es en el nivel en el que laboro se atiende alrededor de 35 alumnos y contamos con una gran diversidad de formas de aprendizaje, de bagaje cultural, problemas personales que en ocasiones también interfieren en el aprendizaje, como mencionaba al inicio se deben considerar diversas estrategias que apoyen el trabajo como las siguientes: memorama para que los niños recuerden imágenes, fechas, episodios y acontecimientos históricos que han marcado la historia de nuestro país, implementación del canto y los corridos, uso de encilcomedia y otros aparatos tecnológicos para la proyección de videos o diapositivas con temas escolares.

Las siguientes son algunas estrategias encontradas en http://genesis.uag.mx/escholarum/vol12/estrategias.html, que la verdad me parecieron muy útiles y que hay que considerar.

1. Ante todo estar con el grupo con tranquilidad y seguridad, esto nos va a ayudar a captar la atención del alumno, va a estar al pendiente de lo que decimos.

2. Contar la historia como si fuera un cuento, no sirviéndose de la memoria, sino haciendo nuestro lo que se narra. Debemos de saber que se quiere transmitir, que queremos aportar, para que el alumno lo asimile y lo entienda.

3. Al realizar presentaciones algún programa diseñado para ello, como Power Point, no se debe abusar con el texto, máximo 6 ó 7 renglones por diapositiva. Debe existir congruencia entre el contenido y las imágenes, para que el alumno tenga la presencia auditiva y visual del planteamiento histórico propuesto. Es decir complementariedad dinámica entre imagen y texto.

4. Aunque hay imágenes como portadoras de contenido relevante en sí mismas, el objeto de estudio está “contenido” en ellas. Así que depende del maestro al usar una imagen que propone que sea parte de un texto o movilizar el aprendizaje.

5. Uso de alguna plataforma educativa como Moodle. Se pueden diseñar variadas estrategias didácticas en ella. Requiere que el profesor sepa utilizarla y por supuesto, el alumno. Permite el acceso

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