LA ENSEÑANZA DE LA MÚSICA EN PREESCOLAR Y BÁSICA PRIMARIA

LA ENSEÑANZA DE LA MÚSICA EN PREESCOLAR Y BÁSICA  PRIMARIA

Si bien es cierto que la música es un gran estimulante cerebral para los menores, también podemos decir que esto nos puede ofrecer resultados más allá de una estimulación. En el aula de clase los niños pueden desarrollas aptitudes al igual que actitudes a la hora de desempeñar sus deberes; enfocándonos en preescolar podemos facilitar el aprendizaje de los colores, las vocales y palabras de objetos básicos que están diariamente en su entorno como lo es una silla. Para llegar al objetivo podemos ofrecer técnicas con sonidos, al asociar cada letra con un sonido. Es decir, el sonido de un avión se puede asociar con la primera vocal y así ellos desempeñarán sus actividades y obtendrán mejor aprendizaje.

En la básica primaria estamos hablando de menores con más años de experiencia. Aquí ya podremos encontramos algunos gustos y también algunos talentos que ellos desarrollan. Se pueden aplicar pequeñas encuestas para determinar un mayor porcentaje con respecto al género que tiene más afinidad con los niños y de esa manera generar actividades para que ellos se asocien con esto y no exista ningún inconveniente. Para generar afinidad con la música no se puede pretender ser rígido y exigirles a ellos que sientan con gusto por un solo instrumento, la opinión del niño cuenta y por esa misma razón una encuesta no estaría mal.

Para generar gusto en los niños podemos crear canciones con diferentes temáticas utilizando la percusión, así se le hace similitud a un instrumento de este tipo. Ellos pueden ser sus mismos instrumentos utilizando sus manos e incluso alguno de los objetos que utilizan para poder estudiar sin generar daño alguno en estos. Otra forma de influenciarlos para poder llevar a cabo la enseñanza de la música es utilizando dinámicas o juegos que involucren canciones fáciles de aprender; incluso estas canciones pueden ser compuestas por el mismo docente y manejando contenido cultural para que el trabajo sea fructífero.

Hay un método que se lleva a cabo en diferentes escuelas de formación para menores que fue creado por Carl Orff, un compositor alemán. El nombre del método es el apellido del mismo. Éste método consiste en utilizar canciones infantiles en las cuales las sílabas son repetitivas, trabajando diferentes ritmos y de ahí se puede partir para asociarlo con algún movimiento ya sea haciendo palmadas, pisando fuerte o generando silbidos. Esto hace que ellos atiendan sus necesidades expresivas y también tener una participación en grupo, facilitando su relación con el entorno en general; ya sea sus compañeros o el espacio con el que cuenta. Una forma de llevar a cabo éste método es ubicándolos en diferentes partes del salón de clase, cada uno tiene que generar un sonido de percusión diferente al otro dependiendo de su ubicación, un niño se vendará los ojos y estará en el centro del salón y al hacer relación con el sonido que él considera genera un movimiento para identificarlo, aleatoriamente los niños cambiarán de lugar y al finalizar la dinámica se debe crear un baile y también, una canción para poder expresar este.

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