7 Habitos De Un Adolescente Altamente Efectivo

Habito 1: Ser proactivo.

En este hábito se habla sobre la pro actividad, que significa tomar responsabilidad y también de asumir el control en toda situación que se nos presente en la vida de una forma activa, que implica iniciativa y acción es la clave para desarrollar los otros hábitos restantes.

Es tomar decisiones con base en valores pensando siempre antes de actuar evitando ser impulsivo, es hacer que las cosas sucedan.

Unas características con las que se deben contar para ser una persona proactiva: el autoconocimiento; la consciencia, es decir, escuchar tu voz interior; imaginación, para ver nuevas posibilidades, y por ultimo tener una voluntad independiente, que es tener el poner de elegir.

Hay un opuesto a las personas proactivas (toman la responsabilidad de su vida), que son las personas reactivas (culpan a los demás y hacen que las cosas le sucedan), son los que suelen echar la culpa a su entorno de los problemas que lleguen a tener, estos nunca asumen sus responsabilidades, se ofenden de una manera muy fácil, se enojan y dicen cosas que al final terminan lamentándose.

Podemos controlar solo una cosa, que es como reaccionamos a lo que nos sucede. Necesitamos dejar de pensar en las cosas que no podemos controlar y comenzar a pensar en las que si podemos, convertir esas fallas en triunfos.

Ser proactivo es el primer paso hacia lograr la victoria priva, tienes que sentir que estas a cargo de tu vida para que todo sea posible.

Habito 2: Comenzar con el fin en la mente.

Aquí se dice que una persona tiene que fijarse las metas primero para saber a dónde va a llegar en el futuro, establecer con claridad las metas y objetivos a seguir en el futuro a corto y a largo plazo utilizando una herramienta que es la imaginación. Debes decidir a dónde vas, qué es lo que piensas hacer con tu vida, ya que si sigues sin saber nunca llegarás a ningún lado y te perderás en el camino. Esto no quiere decir que tienes que tener todo planeado en tu vida, si no, que tienes que comenzar a crear una idea de cómo quieres ser en tu futuro para poder establecer estrategias y llegar a dicho objetivo.

Es muy importante poseer este hábito, ya que en la edad de la adolescencia pasamos por un cruce crítico de la vida que le llaman el “crucero de la vida”, los caminos a seguir que elijas en tu presente pueden llegar a afectar en tu persona en el futuro. Además, si no decides tu propio futuro hay una probabilidad que alguien más lo haga por ti.

Las personas que no tienen este hábito en su vida, con frecuencia siguen a cualquiera que crea tener el papel de líder (que está dispuesto a dirigir), incluso los siguen hacia cosas que no son para nada correctas, no son buenas opciones y no los llevaran muy lejos. Para tener una visión es necesario tener un concepto de misión personal el cual es como tener un credo personal que afirma lo que es tu vida.

Primero hay que descubrirse así mismo, comenzar sin un fin en la mente, es vivir el momento, no pensar en el futuro, desperdiciar la vida y tomar todo a la ligera. Para hacer tu vida extraordinaria hay que tener en cuenta que la vida es una misión.

Habito 3: Poner primero lo primero.

Aquí se habla de hacer prioridades y administrar el tiempo para hacer lo más importante lo primero, es más que administrarse el tiempo. En este hábito también hay que aprender a ser fuertes, es superar temores, sentirse fuerte ante la dificultad. Es hacer que las metas y misiones sean lo primero en la vida; tú eres el que decide a dónde ir y vas a llegar, no te dejas detener por obstáculos. Hay algunos factores que se tienen que diferenciar: lo importante (las cosas que deben de ir primero) y no importante, lo urgente (cosas que exigen atención inmediata) y no urgente, para así poder priorizar. Un detalle es que lo urgente no nos puede hacer olvidar lo importante.

El adolescente que se marca prioridades tiene en cuenta lo que es importante y no llega a sentirse en situaciones de estrés, porque planifica y fija sus metas, realiza las tareas antes de tiempo. Es donde debemos enseñarles a manejar sus tareas: siempre se planifica antes lo importante y así se evitan las urgencias en todo lo posible. Tiene sus actividades bajo control, lo revisa y lo realiza de una manera ordenada. Controla su vida, está equilibrado y consigue sus metas.

Los adolescentes que no manejan bien sus prioridades, tienen que aprender a hacer primero lo importante, a no distraerse con lo superfluo y a saber decir no a lo que no tiene tiempo de hacer, y a no descansar cuando tiene obligaciones. Aquí se recomienda tener una agenda y planificar cada semana los siete días que tiene por delante.

Habito 4: Pensar ganar- ganar.

La mayoría de las personas piensan que tienen que ganar o tienen que perder, y esa es la actitud que predomina en todos los contextos. Piensan que tiene que ganar para no sentirse como perdedores, que son los mejores, o por lo contrario, los peores. Esta perspectiva causa un impacto negativo en la persona, ya que puede ocasionar una autoestima baja.

Es una actitud ante la vida: puedo ganar y los demás también, y es básico para convivir bien. Se basa en creer que somos todos iguales. En las relaciones con los demás no se trata de ganarles, sino de ganar en la relación. El autor asemeja el impulso por vencer a los demás a un tótem, a una medida, en la que solo importa tener la mayor parte, de lo que sea.

Para poder pensar ganar-ganar se debe ganar primero la victoria privada y evitar la competencia y la comparación, es cierto que la competencia puede ser saludable ya que nos ayuda a mejorar como personas. La competencia es saludable siempre que sea contra uno mismo y solo se vuelve dañina cuando relacionas tu autoestima con el ganar y la usas para ponerte

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