El alumno es un ser sociable, que no crece aislado

El alumno es un ser sociable, que no crece aislado, sino bajo el influjo de los demás y está en constante reacción a esa influencia. La enseñanza resulta no solo un deber, sino un efecto de la condición humana, ya que es el medio con que la sociedad inmortaliza su existencia.

El desarrollo cognitivo dentro del ámbito de la educación tiene grandes influencias en los aprendizajes que el alumno recibe del exterior; está constituido por lo aprendido durante su paso por la primera instancia educadora como es la familia y en el mismo círculo escolar. El docente debe de saber interactuar y comunicar el conjunto de conocimientos y aprendizajes significativos a través de los métodos, estrategias y actividades apropiadas, evitando de esta manera la improvisación; los alumnos son muy receptivos y se dan cuenta cuando el docente no lleva la secuencia de actividades a realizar.

Nuestro reto como profesores es saber utilizar, todos esos conocimientos con los que ya cuenta el alumno y partir de ellos en el proceso de aprendizaje. El profesor es el sujeto que enseña y el cual es el encargado de provocar dicho estímulo, con el fin de obtener la respuesta en el individuo para que aprenda; la cual da lugar a la formulación de la motivación, principio básico de todo proceso de enseñanza que consiste en estimular a un sujeto para que éste ponga en actividad sus facultades.

Una de las problemáticas del grupo son la lectura y escritura ya que todavía no se encuentran las nociones muy claras de éstas. El niño desconoce que se tiene una relación entre la escritura y la oralidad, pero con el tiempo percibe que requiere de una cantidad mínima de grafías para que pueda formar una palabra, se dan cuenta de que debe haber variedad en las letras con las que escribe su nombre.

Los sistemas de escritura se desarrollaron para transmitir mensajes a través de patrones ópticos que representan el lenguaje, el cual, está formado por segmentos (fonos, fonemas, sílabas, morfem

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