LA CONTAMINACIÓN DEL SUELO.

LA CONTAMINACIÓN DEL SUELO.

Al hablar de contaminación del suelo se puede hacer referencia a la presencia de compuestos químicos e inorgánicos hechos por el hombre o por otro medio al ambiente natural del suelo. Esta contaminación ordinariamente se produce por la ruptura de tanques de almacenamiento subterráneo, aplicación de pesticidas, filtraciones de rellenos sanitarios o de acumulación directa de productos industriales. La mayoría de químicos comunes incluyen derivados de petróleo, solventes, pesticidas y otros metales pesados que al caer en el suelo producen cierto deterioro. Éste fenómeno está estrechamente relacionado con el grado de industrialización e intensidad del uso de químicos. Cuando se produce la contaminación de suelos también se pone en riesgo la salud al entrar en contacto con fuentes de agua potable. La delimitación de las zonas contaminadas y la resultante limpieza de esta son tareas que consumen mucho tiempo y dinero, requiriendo extensas habilidades de geología, hidrografía, química que normalmente no se pueden sufragar.

El depósito o abandono de todo tipo de contaminantes en el suelo ha sido durante décadas una solución efectiva y económica para deshacerse de estos residuos. En los años 60 y 70 se evidencia el error de estas prácticas al producirse en diversos países notables casos de intoxicación en la población por los residuos enterrados durante años.

Las formas de contaminación de un suelo se pueden especificar de diferentes modos. Se podría decir contaminación superficial cuando se acumulan residuos vertidos accidental o voluntariamente en el terreno.

Subterránea cuando se entierran residuos. Que a veces puede ser un vertido alevoso; y que en la actualidad, es una de las formas de contaminación más peligrosas dada la presencia de sustancias tóxicas y peligrosas y del desconocimiento del foco contaminante.

También está la contaminación fortuita o por negligencias en la gestión de los contaminantes. Son los casos de fugas de depósitos, accidentes en los que se produce la liberación al medio de sustancias tóxicas.

Y tal vez, la contaminación puntual que es una contaminación localizada con un núcleo emisor desde el que pueden movilizarse los contaminantes a otros elementos del medio (atmósfera, aguas superficiales y subterráneas).

Como se puede apreciar, la variedad y cantidad de productos contaminantes de un suelo es prácticamente inabarcable; lo único que se pueden ver son los efectos generados por éstos.

Dada la facilidad de transmisión de contaminantes del suelo a otros medios como el agua o la atmósfera, serán estos factores los que generan efectos nocivos, aun siendo el suelo el responsable indirecto del daño.

Por tanto, se puede concluir que la presencia de contaminantes en un suelo supone la existencia de potenciales efectos nocivos para el hombre, la

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