Aborto Y El Derecho A La Vida

El aborto y el derecho a la vida

Vivir en democracia se fundamenta en una sociedad responsable de actos y dueña de su destino, donde cada individuo responde por sus valores éticos y morales, las decisiones personales que afectan plenamente al individuo, no deben verse acotadas por normas gubernamentales. Chile evidentemente está entre los países más conservadores del mundo en cuanto a sus leyes, lo cierto es que las leyes que prohíben todo aborto niegan a las mujeres la más básica facultad humana de la autodeterminación, y ya es tiempo que el Estado asuma su carácter laico, que respete nuestras decisiones sobre continuar o no un embarazo, o con quien formamos familia, es su rol garantizar ésta libertad con igualdad y sin discriminación.

En mi opinión cada mujer debe tener el privilegio de decidir si abortar o no, en el caso de un embarazo inviable, excepciones de violación o riesgo de vida de la madre en el periodo de gestación, en donde el concepto y derecho fundamental de vivir se divide en el cuestionamiento natural de optar por lo uno o lo otro.

Dentro de las situaciones externas, que desde mi punto de vista serian excusables para un aborto, se encuentran aquellas en las que la vida de la madre y/o feto corren peligro, en cuyo caso, naturalmente, prevalece la vida de la madre, ya desarrollada. Sin embargo, existen países como el nuestro en donde éste tipo de aborto es ilegal y se pone en riesgo la vida de ambos, muchas veces con la consecuencia de la fallecimiento de madre y feto, cuando se podría haber evitado al menos una muerte.

Ahora refiriéndonos al caso de violaciones, en donde el feto ah sido concebido fruto de una relación traumática, en que aparte de los traumas post violación, a la afectada se le ve obligada a responsabilizarse del bebé fecundado, lo que provoca en la mayoría de los casos enfermedades mentales y psicológicas, que si bien no necesariamente lleva a la muerte, sus repercusiones pueden ser aún peores, ya que será una carga para ella, para su familia incluso para su hijo. Por otro lado muchos casos de violación optan por abandono o custodia de instituciones sociales, conocidos como orfanatos, que por lo menos en Chile, nunca han estado a la altura de las circunstancias, es decir cuidar niños que nadie está dispuesto a proteger, cosa que desde mi punto de vista requiere aun más preocupación que los cuidados que se le dan normalmente a los pequeños, tomando en cuenta también lo difícil que es el tramite de la adopción en éste país.

En Chile se practican entre 100 mil y 150 mil abortos cada año en forma clandestina, en donde la mayoría de estos casos lo abortos no serian excusables, es decir fueron fruto de una fecundación “normal” entendiéndose por normal un acto sexual voluntario y sin anomalías en su periodo de fecundación, en el que la responsabilidad recae plenamente en el individuo y en sus actos, esto se concibe en la mayoría del mundo como un delito, sin embargo creo que la responsabilidad de éstos

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