Sistema Educativo

Conocer las dimensiones de gestión escolar, permite identificar los procesos que se llevan a acabo al interior de la escuela y proyectar nuevas formas para iniciar o incrementar una mejora. Sin embargo, conocer las dimensiones no es suficiente para lograr establecer un punto de llegada que responda a metas comunes dentro del sistema educativo nacional. Para ello, se requiere establecer estándares educativos que permitan realizar comparaciones al interior de la escuela contra sí misma y orientar al colectivo escolar en su ruta de mejora.

Un estándar puede ser entendido como un parámetro que sirve para reconocer los asuntos clave que son necesarios, de modo que favorezcan las decisiones que lleven a formular acciones que en el mediano o largo plazo permitan alcanzar cada uno de ellos y que estimulen el interés por desarrollar innovaciones.

A través del MGEE, se promueve la convergencia de la gestión, las dimensiones y los están¬dares, mediante una interrelación que establece una vía de acceso a la calidad educativa. De esta forma se pretende que el centro escolar, al considerar los estándares como criterios de calidad, establezca las relaciones necesarias para incluir procesos de mejora asociados a compromisos y metas del documento de planeación que le permita avanzar en su mejora y buen funcionamiento.

Es importante reconocer que el MGEE no es modelo cerrado, al contrario, es un modelo abierto y flexible que puede ser considerado para establecer procesos de implantación de sistemas de calidad total. Así, los estándares pueden ser desglosados en indicadores para el cumplimiento de metas, y los componentes del modelo son la base para establecer procesos que los acompañan y que una vez documentados formen el sistema de calidad.

Estos criterios operativos que describen cada uno de los estándares sugieren la posibilidad de articulación con programas y proyectos educativos, con el propósito de fortalecer los procesos de enseñanza y aprendizaje. Asimismo, brindan información para una probable vinculación entre instituciones y organizaciones cuyos apoyos beneficien el desarrollo escolar en aspectos de infraestructura, adquisición de materiales, acciones sociales, educativas y culturales, entre otros.

Los estándares son referentes que permiten a la escuela establecer procesos de autoevaluación, con los componentes como ejes transversales que se interrelacionan entre sí, ya que en algunos casos son base para la creación de condiciones, en otros casos son parte de los procesos permanentes y en otros, resultado de una buena gestión escolar.

Al analizar los estándares, se puede percibir la manera en que cada uno de ellos se encuentra presente en las cuatro dimensiones que articula el MGEE. Cada estándar cuenta con criterios operativos que permiten diseñar, con mayor pertinencia, la planeación educativa estratégica.

Para una mayor precisión y comprensión, los estándares

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