La Tercera Ola

El texto hace referencia principalmente a la eliminación del detalle cuantificado como fundamento de una síntesis de investigaciones, búsqueda de soluciones o formas de vida, es decir, el estar centrados en la solución de un problema, según su detalle más pequeño, es entrar en un error más grande y no hace sino dejarnos sabiendo cada vez más cosas sobre cada vez menos cosas.

Para llegar a este punto, Toffler hace una serie de contradicciones que llama paradojas del presente; según él son el impedimento de una amplia búsqueda de un gran futuro, tomando como impedimento de esta búsqueda, una perspectiva del mundo en línea recta, perspectiva que nos hace pensar que el mañana es una extensión del hoy, sin saber que las tendencias por duraderas o poderosas que parezcan, no se limitan a continuar de una manera lineal.

Este capítulo se trata pues de hacer una serie de investigaciones para hallar el futuro que nos depara y las tendencias que lo acompañan, precedidas por lo que es llamado “la segunda ola”, tendencia que esta caracteriza por hechos como los anteriores mencionados.

Para llegar a este punto el autor hace una introducción que al final toma como analogía, las dos relacionadas con la búsqueda del futuro.

“El 8 de agosto de 1960, un ingeniero químico nacido en Virginia del Oeste y llamado Monroe Rathbone tomó en su despacho de la plaza de Rockefeller, en Manhattan, una decisión que quizá futuros historiadores elijan algún día para simbolizar el fin de la Era de la segunda ola.”

La decisión tomada por Rathbone fue la de reducir los impuestos que Exxon Corporation pagaba a los países productores de petróleo. Esta decisión, afecto primeramente a los países que dependían principalmente de los ingresos que procedían de los pagos realizados por las compañías petrolíferas. Sin embargo, el rumbo de esta decisión tuvo un efecto contraproducente para quienes la adoptaron, ya que después de 13 años, los países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), tras haber entrado en crisis, adoptaron medidas y cuadriplicaron sus ingresos procedentes de petróleo.

“EL SOL Y MAS ALLA”

A raíz de la gran crisis de energía que ha estado sucediendo, se crean alternativas, planes o soluciones, pero al analizar de una manera más interna, nos damos cuentas que todas estas propuestas están arraigadas a las políticas de la segunda ola, la cual se apoya en la no renovabilidad, proceden de depósitos costosos y carece de diversificación. Surge de esta manera la cuestión de que si podemos sobrevivir así en un mundo que impone estas características de la segunda ola y es precisamente por la escasez de sus compuestos y por la contaminación de estos mismos por lo que se da la crisis, pues compuestos como el petróleo, el carbón y el gas desparecen cada vez más, pues la mayoría de expertos concluyen que esta dependencia del combustible fósil no puede continuar indefinidamente, por muchos nuevos yacimientos petrolíferos que se descubran, además Se discute acerca de cuánto tiempo falta para que se acaben las reservas.

Es de esta manera que se puede concluir que la era del petróleo está concluyendo, los propietarios de las compañías petrolíferas lo saben, los gobiernos lo saben, y se podría decir que el plazo que falta para que este acontecimiento se de está muy cerca, incluso no se habla de décadas, sino de años.

A esta crisis pueden surgir alternativas como la implementación de energías nuevas, abastecidas por elementos naturales, renovables y a costos favorables, sin embargo, como en todo proceso se da una guerra por ideas y dinero y en este caso se pueden dividir en tres:

-Están en primer lugar los que tienen intereses tradicionales, carbón, petróleo, gas, energía nuclear, entre otros, y son de hecho los defensores de la segunda ola, quienes por su alta influencia ocupan una posición casi inalcanzable.

-En este lugar están quienes se encuentran a favor de una base energética de la tercera ola, conformados por científicos, ecologistas y empresarios de industrias de vanguardia, a quienes los propagandistas de la política de segunda ola suelen presentarlos como ineptos y deslumbrados por una tecnología fantástica

-Este último grupo lo conformas quienes suelen ser denominados como propagadores de la primera ola, quienes no piden un avance innovador, inteligente y sostenible, sino una regresión al pasado preindustrial.

Sin embargo, al final solo puedes vencer quienes propongan políticas ni de la primera ni de la segunda ola. Los defensores de la primera están entregados a una fantasía y los de la segunda se esfuerzan por mantener una base energética cuyos problemas llegan a ser insuperables y aunque las fuerzas de la segunda ola puedan parecer poderosos y los de la tercera ola débiles, no sería buena idea seguir sujetos a un pasado sin diversificación, es decir no se trata de decir que la segunda ola va a ser reemplazada por una nueva, sino cuánto tiempo tardará esto en pasar.

En las “herramientas del mañana” se hace una comparación de las tecnologías regresivas de la segunda ola y las tecnologías eficaces e innovadoras de la tercera ola.

Elementos como el carbón, ferrocarriles, hilaturas, automóviles, caucho, fabricación de máquinas fueron algunas de las tecnologías adaptadas en la segunda ola, caracterizadas por la utilización de materiales escasos, mano de obra repetitiva y agotadora y largas series de producción.

Tras analizar factores como estos, surgieron un grupo de nuevas e innovadoras industrias de la tercera ola, capacitadas de rápidos avances; electrónica cuántica, teoría de la información, biología molecular, oceánica, nucleónica, ecología y las ciencias espaciales. De esta nueva ciencia fue que surgieron las nuevas industrias como las computadoras, avanzadas comunicaciones etc.

La comparación que se hace en esta parte es específicamente de las ventajas que tienen las tecnologías de la tercera ola en contraste con la segunda ola, y llos grandes beneficios que esta implica.

En esta parte; “Maquinas de obra” el autor hace referencia principalmente a la industria espacial y resalta eventos fantásticos como:

- La trasportación de personas entre el espacio y la tierra semanalmente.

-La consideración de empresas estadounidenses y europeas a la “frontera superior” como aspecto de una nueva revolución tecnológica.

-En la tierra muchos materiales de alta tecnología requieren de una manipulación controlada y delicada

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