ENSAYO SOBRE PLANEACIÓN ESTRATÉGICA Y VENTAJA COMPETITIVA

ENSAYO SOBRE PLANEACIÓN ESTRATÉGICA Y VENTAJA COMPETITIVA

CIPA #2

ALFREDO ARAGÓN POLO

MARÍA IBÁÑEZ RUÍZ

JORGE BRAVO TURIZO

RAMIRO SALAS LARA

UNIVERSIDAD DEL TOLIMA

TECNOLOGÍA EN REGENCIA DE FARMACIA

GERENCIA ESTRATÉGICA

BARRANQUILLA – ATLÁNTICO

SEPTIEMBRE DE 2020

Planeación estratégica y ventaja competitiva

Desde sus inicios, las grandes, medianas y pequeñas empresas, se trazan una meta por la cual trabajan en la elaboración, desarrollo e implementación de distintos planes operativos que les permitan alcanzar sus objetivos. muchas de estas organizaciones, han diseñado estrategias con las cuales han logrado obtener ventajas frente a sus competidores, hecho que ha contribuido a que obtengan una mejor posición en el mercado y a que sean cada vez más exitosas. No obstante, el éxito o el fracaso de una empresa, depende en gran medida de su propio desempeño, y no solo de los planes que se diseñen como parte de un proceso de planificación estratégica empleado por la misma compañía, con la intención de materializar las ideas plasmadas en el marco de su visión empresarial.

Es por esa razón, que en el presente ensayo se analiza un tema que ha cobrado gran importancia en el sector empresarial como lo es el proceso de planeación estratégica. Sin embargo, este escrito pretende además de exponer la incidencia de la planificación estratégica en la consecución de ventajas competitivas, explicar cada una de las etapas que comprende el mencionado proceso del cual se han elaborado diferentes modelos propuestos por distintos autores, entre los cuales se destacan el proceso de planificación estratégica según Hill & Jones, el proceso de planificación estratégica según Robbins & Coulter, el proceso de planificación estratégica según Fred David, el proceso de planificación estratégica aplicada de Goodstein, Nolan & Pfeiffer y el proceso de planificación estratégica creado por Humberto Serna Gómez, siendo este último el modelo en el cual se enfoca este texto al considerarlo uno de los más apropiados a la hora de buscar alternativas que garanticen el futuro de una empresa.      

De acuerdo con Humberto Serna Gómez (2008), la planeación estratégica es el proceso por medio del cual una empresa define aspectos importantes para su funcionamiento tales como la misión, la visión a largo plazo y los métodos que empleará para alcanzarla basándose en el análisis minucioso de sus fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas. Este proceso requiere de la participación de todos los miembros de la organización, la recopilación de información que contribuya a conseguir el éxito de la misma, y la revisión constante con el fin de realizar los ajustes necesarios para lograr que la planeación estratégica sea un tipo de administración que haga de la empresa una entidad única y progresiva.

Según Humberto serna (2008), la planeación estratégica se desarrolla en tres niveles que él mismo describe como planeación estratégica corporativa que abarca la junta directiva y la alta gerencia, planeación estratégica táctica que involucra las áreas funcionales o departamentos que componen la empresa y por último, la planeación estratégica operativa, en la cual se encuentra directamente implicado el recurso humano encargado de ejecutar el plan de acción y las estrategias planteadas por la organización con la finalidad de alcanzar los objetivos trazados en el proceso de planificación estratégica.  Además de esto, este método administrativo está conformado por una serie de pasos o etapas propuestas por el autor anteriormente citado, y que deben efectuarse de forma correcta para garantizar el éxito del proceso.

En ese sentido, Serna Gómez (2008) plantea un conjunto de etapas que deben ejecutarse durante la elaboración e implementación del proceso de planeación estratégica, entre las cuales se encuentra la definición del horizonte de tiempo  como la primera de las etapas de este proceso, la cual se refiere al plazo (largo, medio o corto) que se requiere para desarrollar y completar las acciones que este método conlleva. La segunda de estas etapas consiste en definir los principios corporativos, es decir, los valores, las creencias y las normas que regulan la vida de una organización, los cuales definen el soporte de la cultura organizacional, y aunque no hacen parte de la misión y la visión, constituyen las bases principales de las mismas.

Como tercera etapa, el autor propone realizar un diagnóstico estratégico basado en el estado actual de la empresa; dicho en otras palabras, se trata de hacer un análisis interno y externo sobre la situación actual de la compañía con el único propósito de obtener, procesar e identificar sus debilidades, oportunidades, fortalezas y amenazas, lo cual conducirá a la implementación de un análisis DOFA, método que permitirá definir las estrategias aprovechando las fortalezas de la empresa, así como revisar y prevenir el efecto de las debilidades, prepararse para sacar el mejor provecho de las oportunidades y prever de manera oportuna el efecto de las amenazas, un estudio que sin duda representa un gran aporte en el proceso de planeación estratégica.  

Por otra parte, el direccionamiento estratégico como cuarta etapa está integrado por la misión, la visión y los objetivos de la organización. Por lo tanto, en este punto se debe establecer hacia dónde va y a dónde quiere llegar la empresa, siendo la misión la razón de ser de la empresa conformada por sus productos, servicios y operaciones que la distinguen de las demás organizaciones, y la visión, una agrupación de ideas generalizadas que proporcionan el marco de referencia de lo que una compañía es y de lo que quiere llegar a ser en el futuro. De este modo, se da paso a la quinta etapa del proceso de planificación denominada por Humberto Serna como proyección o formulación estratégica, en la cual se definen las opciones estratégicas que deberán convertirse en planes de acción concretos, e inmediatamente se determinarán las áreas funcionales responsables de la ejecución de cada uno de ellos.

Una vez se han completado las anteriores etapas y se han definido los planes estratégicos, antes de implementarlos, deben ser difundidos entre todos los miembros de la organización con el fin de que cada funcionario identifique sus responsabilidades en la ejecución de los mismos, lo cual constituye la sexta fase del proceso titulada por el autor como alineamiento estratégico, y que antecede a la planeación operativa, etapa  que da inicio a la ejecución de los planes estratégicos y en la cual se deberá retroalimentar todo el proceso con el objetivo de identificar los ajustes que en algún momento requiera, integrando así, un sistema de relaciones interpersonales que hace de la planeación estratégica un proceso dinámico, ágil y participativo.

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