Las Verdaderas Preocupaciones De Un Maestro
Enviado por airamcastillon • 18 de Agosto de 2011 • 466 Palabras (2 Páginas) • 614 Visitas
Las verdaderas preocupaciones de un maestro
Hay muchos aspectos que podemos conocer de un estudiante, conocer el ámbito académico, físico motriz, emocional, entre otros y poder planear como maestros la forma de trabajo para su formación y evolución en el área en el que uno es especialista.
Pero, ¿de qué manera se pueden conocer los valores de un estudiante?, ¿cómo planear un trabajo sobre la práctica de valores en la escuela?, ¿cómo enseñarles a ser respetuosos, responsables, generosos, ordenados, solidarios, tolerantes…? Estos aspectos no son enseñados desde una separata, ni mucho menos en un video.
Es probable que nos hayamos preguntado cómo evaluar los valores de los estudiantes. Y estoy convencido de que esta pregunta termina dando vueltas como un bumerang, puesto que llegará a caer en nosotros mismos, ya que la evaluación de la práctica de valores en los estudiantes debe partir y terminar en nosotros, que como maestros somos el reflejo de nuestro hogar y sociedad.
Este tema ya es una verdadera preocupación. Pues bien, al ser maestros debemos ser viva y buena imagen ante las personas, principalmente nuestros estudiantes.
A través de la observación, entrevistas a los padres, comentarios de los docentes y el desarrollo diario de las actividades en el aula, podemos organizar las necesidades valorativas de los estudiantes, pero al ser todos los grupos diferentes y cada estudiante único y original, resulta complicado este trabajo, pero….prioricemos estos valores como escala.
El Orden es una de las virtudes vitales por desarrollar, tanto en el desarrollo de sus actividades, como en el ámbito de sus ideas y pensamientos. Desarrollar hábitos de orden acompañan la responsabilidad e influyen en la eficiencia y eficacia del trabajo, por ello es que apunta a ser el principal trabajo docente para con los estudiantes.
La Convivencia asertiva que es el respeto tanto para uno mismo como el que debemos tener hacia otra persona. Y aunque existe una falta de compromiso con las normas de convivencia, los maestros debemos asegurar la autoestima e integración en nuestros estudiantes a través de la comunicación asertiva y la aplicación de palabras cálidas y básicas para la convivencia como: por favor, gracias, buenos días, etc.
La convivencia va de la mano con la tolerancia y justamente esta virtud es importante trabajarla con más frecuencia entre maestros y estudiantes, porque la aplicación de esta y otras virtudes deben tener un espacio o momento para poner en práctica los valores que se han aprehendido.
De la misma forma, los jóvenes necesitan mostrar sus defectos, aceptarlos como tal y tener la voluntad de superarlos.
Finalmente, no se puede lograr algo por más mínimo que sea si no hay voluntad para manejar situaciones problemáticas, decisión para afrontarlas y establecimiento de metas para llegar a superarlas. Como maestros, es nuestra
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