PSICOPATOLOGÍA: TRASTORNOS MENTALES

1. PSICOPATOLOGÍA: TRASTORNOS MENTALES

1.1. El concepto de normalidad y salud

Para dar inicio este apartado, la pregunta obligada es; ¿Qué es normal?.

Según el diccionario de la real academia, normal es; adj, que es corriente, habitual y no llama la atención ni se sale de lo ordinario.

Si analizamos la normalidad desde un punto de vista social, podemos decir que la normalidad es; aquella que está de acuerdo con una norma fijada de antemano, o con lo que se considera razonable o de sentido común, que sirve de norma o regla.

Por lo tanto, ¿se tendrá una definición que nos explique lo que es normal y anormal?,.

Hagamos un sencillo ejercicio:

Viajen a algún lugar, no muy lejano, su casa, observen sus costumbres familiares, habrán algunas muy comunes o “normales” según el entorno en el que se encuentren. Ahora viajen a alguna comunidad de nuestro país, en algunas comunidades existen costumbres que para ellos en su entorno es normal, pero que para nosotros que no somos parte del entorno, de la costumbre y del comportamiento de la comunidad suelen llegara a ser anormales.

Ahora hagámoslo más extenso, vámonos a otro país; por ejemplo, Irak, donde las mujeres están acostumbradas al uso de la burka, en su entorno, es normal, es un comportamiento característico, para nosotros puede ser anormal, pero para ellos no lo es.

Entremos en materia, las conductas antisociales; se entiende por conducta antisocial todo comportamiento que va en contra de la norma moral que daña el bien común social. Pero también dentro de estas conductas encontramos las conductas antijurídicas, que van en contra de la norma jurídica y dañan un bien tutelado por el estado y por consecuencia dañan el bien común social. (Álvarez y Sánchez, 2003).

Ambos tipos de conductas, no son “buenos” para el sano desarrollo social sin embargo ya nos acostumbramos a vivir y ver cada una de ellas, desde una conducta antisocial, como lo sería saludar al vecino de enfrente, (que solo podría llegar a tener un reproche social) y no pasa a más, así como el ingerir bebidas alcohólicas en vía pública y hacerme acreedor a una pena pecuniaria, y que no pasa a más. Hasta llegar a convertirse en una conducta antijurídica, “si saludo al vecino y no me contesta, lo violento, y cometo el delito de lesiones”, bebo en vía pública, me detiene el alcoholímetro, no me detengo, me paso un semáforo en intermitente, impacto en otro automóvil, y el piloto, por el impacto fallece, cometo el delito de homicidio”.

Pero el lector se preguntara, ¿y esto que tiene que ver con la normalidad?. Bien para nosotros que vivimos en una zona conurbada, este tipo de conductas son normales, ya estamos acostumbradas a vivirlas, sim embrago en en una zona, por ejemplo rural las conductas antisociales son diferentes.

Por lo tanto, podemos concluir que el concepto de “normalidad” es un constructo social que está determinado por el entorno social, las costumbres y porque no hasta de las ideologías.

Ahora hablemos del concepto salud.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), menciona que la salud es la condición de todo ser vivo que goza de un absoluto bienestar tanto a nivel físico, como a nivel mental y social.

Por otro lado, las bases biológicas de la conducta, mencionan que un individuo que goza de salud, es aquel que se encuentra en “homeostasis” es decir, en un equilibrio fisiológico, mental y social, de ahí deviene el constructo del individuo como un ente biopsicosocial. (Seelbach, 2012).

Por otro lado, cuando hablamos de salud, estamos hablando de una variable dicotómica, es decir, no puede existir una sin la otra “salud-enfermedad”, “norma-anormal” “bueno-malo”, “blanco-negro” etc.

Una vez comprendido el termino salud, procederemos a explicar cómo se conjuntan estos dos términos. Nomalidad-Salud

Si salud es un equilibrio en el individuo en toda su estructura biopsicosocial y, normalidad es un constructo social dado por el entorno al cual pertenecemos.

Como consecuencia podemos decir que no hay sociedades totalmente sanas o normales y todas las sociedades e individuos tienen desequilibrios y grados de anormalidad según la norma (social, moral y/o jurídica) vigente en el entorno donde se desenvuelva.

1.2. Definición y conceptos de Neurosis y Psicosis

Neurosis

“Quizás llegue un día en que no se sepa, ya bien lo que ha podido ser la locura. Su figura se habrá cerrado, sobre sí misma no permitiendo ya descifrar los retos que haya dejado. Estos trazos mismos, ¿serán otra cosa, para una mirada ignorante, que simples marcas negras?.

Cuando mucho formaran parte de configuraciones que nosotros el día de hoy, no sabríamos designar, pero que en el porvenir serán las rejas indispensables para hacer que resulten legibles nosotros y nuestra cultura.

Artaud pertenecerá al suelo de nuestro idioma y no a su ruptura; la neurosis a las formas constitutivas (y no a las desviaciones) de nuestra sociedad. Todo lo que hoy sentimos sobre el modo del límite o de la extrañeza, o de lo insoportable, se habrá reunido con la serenidad de lo positivo. Y aquello que para nosotros hoy se designa al exterior un dia acaso llegue a ser designado a nosotros” (Focault,1999:328).

Para dar explicación a esta definición iniciamos con este fragmento de la “Historia de la locura en la época clásica II” de Michael Focault (1999), donde se mencionan grosso modo los cambios que va teniendo la concepción de la neurosis a través del entorno.

Este término surge en 1769 para dar explicación a los procesos irracionales de la época. Sigmund Freud, crea el término para explicar las enfermedades del sistema nervioso, mejor llamado “locura”.

El concepto ha ido evolucionando, y hoy por hoy, se entiende como aquel proceso que tiene toda persona para manifestar sus emociones.

La diferencia radica, en el <“como”> manifiestan sus emociones, hay personas explosivas, que reaccionan a acciones. Pero hay otras personas tranquilas que no reaccionan, actúan con base a un análisis. Ambas personas, según Freud (citado en Postel y Quétel, 1993) son neuróticas, una porque es explosiva y no tiene dominio sobre sus emociones y las otra por ser tranquila, se contiene, por lo tanto, reprime y no muestra sus emociones, por ende, ambas personas por las conductas que realizan estarán generando trastornos.

Básicamente esta es la postura de la psicología clínica, toda conducta tiene un motivante y una reacción a una acción, esta reacción es la que genera el trastorno.

Actualmente esta clasificación es utilizada en la praxis criminológica, como explicación

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