Ética y Religión

Introducción

La ética puede sonar a un termino muy ambiguo y paradójicamente se cree simplemente que se trata de la diferencia entre el bien y el mal, casi como un juicio moral sobre uno mismo y las acciones que nos rodean en todo momento y ámbito, sin embargo, ¿Qué pasa realmente cuando mezclamos este pensamiento de razonamiento con la religión?

La religión va más allá de una simple creencia es la fórmula de hora de nuestros pensamientos nuestras normas inclusive de nuestro actual debido a que tienen poder sobre nosotros y, aunque para mucho parece solo una prueba de fe, va mucho más allá de la creencia de un ser superior porque de ser así Los criterios para una religión sería muchísimo más deliberados.

La ética no solo se queda en el bien y el mal, sino que va más allá y busca hallar propósitos, finalidades, valores, moral, juicios y un actuar en una comunidad.

Todas estas son leyes que podemos decir que la religión también podría llegar a debatir o abarcar sin embargo ¿lo hace de la misma manera que la ética? y ¿por qué es tan importante saber qué pasa si esto se juntan?

La ética es el comportamiento humano. Hago lo que soy, soy lo que hago. Mi ética manifiesta mi religión. La ética, que no es fundamento de nada, se fundamenta en la religión. Soy ético en la medida en que soy religioso. Una buena ética proviene de una buena religión.

Religión y ética

Todos los niños pertenecientes a la religión católica, o al menos la gran mayoría ha pasado por el proceso del bautizo y si no son de esta religión al menos ha pasado por un proceso parecido en la creencia los ejercen, y este es de ahí donde empieza la ética junto a la religión tomados de la mano para ir imagen para persona de un código moral

No es cierto que la ética empiece allí donde termina la religión. Al contrario, no son líneas paralelas entre sí, una es dependiente de la otra de tal manera que sin una creencia solida será muy raro poder mantener una línea de valores propios los cuales van formulando la ética propia.

Si hay la carencia de una ética propia, las reglas sociales que se nos sean impuestas podrían ser vistas más como un impedimento que como una ayuda regulatoria para nuestro comportamiento en todo el sentido de la palabra

No solo se hace un abordaje a las normas creadas por uno mismo a un reglamento general impuesto por creencias las cuáles pueden ser divididas en el bien y el mal (cielo e infierno para unas religiones y bastantes con otro tipo de representaciones). Se viaja hasta el punto donde se supone debiera comenzar.

Comienza desde el cómo los humanos creamos una fuerza superior capaz de explicar todo lo que pasa alrededor, y hay desde las más aceptadas como lo son Jesús, Buda, algún santo hasta la abstracta figura de un espagueti volador, que aunque suene ridículo, hay que tomar en cuenta que no se trata de una imposición cultural.

Desde un punto de vista momentánea está última idea puede sonar sumamente loco o sin sentido, pero es ahí donde hay más muestra de la ética, una ética tolerante respecto a las opiniones diversas a pesar de ser completamente contradictorias a las nuestras o en su defecto, incluso ser abiertos a argumentos que ayuden a qué nuestra fe en nuestra religión siga creciendo brindándonos un mejor desarrollo en la misma.

Los mandamientos, a pesar de que cambien de nombre, siguen siendo ligeras reglas mediadoras de nuestro comportamiento, desde decirnos que camino tomar hasta cuál evitar, si llevamos esto a un ámbito profesional puede que comparándolas haya muchas similitudes, un ejemplo de ello es la parte que pide dentro del código ético de psicología tratar al paciente como el humano que es, respetando sus derechos... Si vamos a algún credo, no daremos cuenta las enormes similitudes que guardan y es porque de ahí parte un juicio social, mismo vaso que pasa con las religiones solo que ellos tratan de dar una respuesta

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