Paquete Chileno

El “paquete chileno” es una modalidad de estafa en la que los ladrones cautivan a sus víctimas con falsas sumas de dinero. Generalmente participan dos o tres estafadores. Uno deja caer un paquete, y otro lo recoge haciendo que la víctima lo vea. Este estafador esconde el paquete y aborda al ciudadano una vez se ha alejado su cómplice. El engaño consisten en decirle a la persona que no diga nada y que compartirá con ella la suma de dinero hallada.

Aprovechando la confusión y el afán de salir rápido de la situación, el delincuente dice calcular cuánto dinero hay en la bolsa, y le propone a la víctima cambiarle la supuesta cantidad por el dinero que lleve consigo la persona estafada.

En caso de que la persona acceda, se dará cuenta luego, al contar el dinero, de que la mayoría de billetes son falsos o, incluso, que se trata de papeles.

Años antes muchos chilenos inmigrantes se hacían pasar por urgidos extranjeros o comerciantes que necesitaban cambiar unos dólares por moneda local o dejarle un paquete con supuesto dinero en efectivo o cheque o algún contenido muy valioso , el caso es que te pedían que les dieras dinero a cambio o le pagaras el costo del envío por el paquete. Si la víctima accedía, al abrir el paquete solo había periódico en pedacitos o de plano dólares falsos, mientras tanto el chileno en cuestión salía corriendo. Esto te parecerá sin sentido, como alguien caería esto, pero antes la gente era mas tonta.Con el tiempo eso se fue utilizando como sinónimo de cualquier intento de estafa de un extraño por medio de un supuesto gran negocio o propuesta que inicialmente parecía muy atractivo, pero que solo persigue sacarte el dinero. Hoy día aun tratan de usar ese método, pero ya no son chilenos sino gente de cualquier nacionalidad, acá en Venezuela por lo general Colombianos o Peruanos y también Venezolanos lo hacen en los bulevares muy concurridos y comerciales de Caracas, cuando un extraño te aborda a mitad de calle a "proponerte un Gran negocio" lo más probable es que sea un "Paquete Chileno". Es un termino algo viejo ya no se usa.

Los delincuentes dejan caer en la calle, cerca de la víctima, un paquete que parece contener un fajo de billetes, pero que en realidad es un atado de recortes de papel periódico. En el extremo sí hay un billete verdadero, casi siempre de alta denominación, lo que crea la ficción de que los demás papeles son iguales.

El delincuente llama a la víctima y le dice que el paquete se le acabó de caer. En la mayoría de los casos, quien ha hecho el retiro del banco reconoce que el fajo no es suyo, por lo que el estafador le propone que vayan a una cafetería u otro establecimiento público para repartir el dinero que se acaban de encontrar. Ya en el local, el delincuente aparenta premura y le dice a su víctima que no hay necesidad de destapar por completo el paquete, que le dé lo que tenga en la billetera,

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