Anorexia
TARINGA2014Práctica o problema11 de Octubre de 2014
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Belleza… ¿A qué precio?
Mujeres esbeltas, altas, delicada cintura y piernas largas; hombres fuertes, musculosos y altos… Estos son algunos de los estereotipos que la sociedad ha marcado desde hace varias décadas acerca del hombre y la mujer “hermosos”, pero ¿tendrá algo de malo si no se poseen dichas características? Por desgracia, en los tiempos modernos esto ha influido mucho, sobre todo en los jóvenes quienes buscan obtener estas cualidades a toda costa. A continuación se expondrán las causas de los problemas alimenticios, en este caso la anorexia, y se demostrará que no tiene distinciones de sexo, edad o clases sociales.
Una causa puede ser el hecho de querer parecerse a sus artistas favoritos u otras personas del medio artístico. Esto se debe a no tener seguridad en sí mismo o no quererse tal y como es.
Sentirse gorda se ha convertido en sinónimo de sentirse insegura, asustada, insignificante y ansiosa. Con la anorexia, los sentimientos que una llega a experimentar son incluso más extremos: muchas veces representan heridas profundas que se manifiestan a través del lenguaje del cuerpo. (Bruch, 17)
Hilde Bruch en su libro “La jaula dorada” nos expone que la imagen que cada quien tenga de sí mismo, puede afectar en las emociones. Al comenzar con problemas alimenticios, la manera de sentirse se expresa o se representa a través del cuerpo, porque al sentirse ‘hermosas’ aparentan estar más felices y seguras de sí.Desafortunadamente, esta ‘felicidad’ dura poco, ya que poco a poco, los enfermos de anorexia van dañándose cada vez más y llega a convertirse en algo que no puede evitarse, como si fuera algo que perteneciera a ellos y no pudieran deshacerse de eso.
La anorexia trae consigo, no solo problemas de salud y desequilibrio en el peso, sino que también problemas emocionales y sociales. Estas personas tratan de alejarse y evitar a los demás, adoptando conductas extrañas. Antes se pensaba que esta enfermedad era exclusiva de las mujeres, pero se ha demostrado que, en la actualidad, 2 de cada 10 casos de anoréxica es de hombres con sobrepeso que quieren tener un cuerpo más atlético. Puede que haya más casos de hombres anoréxicos, pero muchos de ellos no se atreven a hablar de eso ya que es un problema que solo era relacionado con las mujeres.
Otro de los principales factores que conllevan a la anorexia es la influencia familiar. “Los padres siempre dicen con orgullo que han dado a sus hijos un hogar armonioso y feliz. Pero puede que la hija anoréxica no haya experimentado lo mismo.” (Bruch, 55). Puede ser consecuencia del rechazo que sin querer los padres muestran hacia sus hijos, o bien, la presión que ejercen hacia ellos. Otra podría ser, el hecho de que los padres comparen a sus hijos entre ellos mismos o con otras personas. Esto es algo que se queda en la memoria de la persona y siempre lo lleva muy presente. Al sentirse así, el enfermo busca el cariño yamor que le falta o le faltó desde pequeño por su propia cuenta y refugiándose en otras cosas.
Muchas veces se puede creer que el problema de la anorexia se corrige al hacer aumentar de peso a la persona, pero no toman en cuenta lo más importante. Esta persona necesita, más que engordar, una terapia emocional que le ayude a superarse, a quererse a sí mismo y no querer parecerse a nadie más, y a pensar de diferente manera acerca de su aspecto físico, ya que el problema se origina en la mente. “Ha sido habitual pensar que la corrección del peso era el problema fundamental, mientras que los asuntos más profundos se dejaban de lado.” (Bruch, 146)
Podemos concluir con que la anorexia y los demás problemas alimenticios, no siempre se deben a sólo querer verse mejor, sino que puede venir desde pequeños como un trauma emocional. No hay que dejarse llevar por las apariencias de las personas, ya que como
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