AMENAZA INTERNA EN TORNO A LA SOBERANIA DE VENEZUELA

AMENAZA INTERNA EN TORNO A LA SOBERANIA DE VENEZUELA

La soberanía nacional existe para garantizar el derecho de cada pueblo para darse a sí mismo un gobierno limitado, dedicado a proteger la soberanía de cada individuo sobre sí mismo, de cualquier ataque interno o externo. Es el Estado de probabilidad de ocurrir o suscitarse hechos, acciones o sucesos con afectación potencialmente negativa a los intereses y objetivos establecidos en las Bases doctrinarias que sustentan la Seguridad, Defensa y Desarrollo Integral de un Estado o Nación, en sus diferentes contextos (Político, Social, Cultural, Ambiental, Militar y Otros). La mayor amenaza es la interna y no precisamente de la oposición, sino aquella amenaza que viene desde un sector del propio de un gobierno, ya sea por los infiltrados o por los negligentes que no hacen sus tareas encomendadas como debe ser. El socialismo como ideología no ha llegado a ser parte de la conducta de los que dicen ser revolucionarios, comenzando por aquellos quienes ostentan cargos directivos y gerenciales en el país, donde el discurso retórico sobre el socialismo es el pan diario de estos compatriotas sin llegar a ser reflejo de una consciencia revolucionaria en la conducta y el estilo de vida.

Las amenazas son constantes, internamente y externamente son evidenciadas a diarios con guerras psicológicas, con mentiras informativas, así como también las amenazas internas ocultas que muy bien están dentro de la revolución con el fin de sabotear las acciones de todo gobierno. La agresión hacia Venezuela tiene un objetivo claro que es la de sembrar la división ante la Unión Sudamericana ya en construcción, esto con la finalidad de frenar la Integración de Latinoamérica.

Venezuela actualmente ha adquirido helicópteros de doble función, aviones de combate, lanchas guardacostas, entre otras cosas, los cuales le permitirán enfrentar la amenaza que representan los grupos armados en la frontera con Colombia ya que es el país con que ha tenido mayor problemas fronterizos. También le permitirán proteger su territorio marítimo de las incursiones de los traficantes de drogas y de flotas pesqueras extranjeras (la pesca de arrastre en aguas venezolanas es ilegal). Las otras compras, fusiles AK-103, cohetes antiaéreos y equipos similares, son armas defensivas concebidas para disuadir a posibles agresores. Ninguno de estos equipos representa una amenaza real para los vecinos de Venezuela y mucho menos para los Estados Unidos como se ha querido decir.

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela enfatiza más la categoría Seguridad que la Defensa. Esta última la refiere sobre todo al rol de la Fuerza Armada Nacional para defender nuestro patrimonio ante las posibles amenazas que pudieran afectar a la Nación.

Así pues, una de las amenazas internas proviene de un sector propio del gobierno revolucionario, y que sea por los infiltrados o negligentes, estos, que consientes o inconscientes menoscaban las instituciones desde sus entrañas. Las amenazas internas están visibles y advertidas. La soberanía nacional existe para garantizar el desarrollo de cada pueblo y para darse a sí mismo un gobierno sin límite de representación o injerencia de otro país. La fuerza armada nacional y organizada por el Estado para garantizar la independencia y soberanía de la nación y asegurar el mantenimiento geográfico mediante la defensa militar. En este sentido, se hace urgente entender la relación existente.

Un conflicto diplomático y político de importancia surgió entre Colombia y Venezuela tras el descubrimiento de una operación encubierta del Gobierno colombiano en Venezuela, consistente en el secuestro de un líder izquierdista colombiano, como es el caso de Rodrigo Granda, en la que estuvieron implicados efectivos reclutados entre los servicios militares y de seguridad de Venezuela.

Tras una investigación realizada

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