Dia Del Maestro

PALABRAS DIA DEL MAESTRO 2013

En el día del maestro, tan solo, me gustaría hablar de quiénes somos. ¿Qué nos iguala? ¿Qué nos identifica más allá del guardapolvo? ¿Qué nos hace maestros?

La historia nos cuenta que ni las didácticas, ni los gobiernos, ni las políticas educativas, ni los edificios, ni las crisis han podido con nosotros… entonces ¿qué es?

Pienso, que se es docente por variadas circunstancias, pero se es maestro sólo por una razón: se cree en el futuro luchando por el presente a través de la formación de personas, en cualquier nivel en que nos desempeñemos.Va más allá de un trabajo, de un título o de un cargo y tampoco se agota en la vocación. Es la elección de una forma de vida que se asume desde la labor diaria, las exigencias, la lucha, el agotamiento, la esperanza y la alegría de hacer lo que elegimos ser.

Paradójicamente, la sociedad ya no valora como antes la figura del docente pero sí le exige la mejor formación de las generaciones futuras. Ante esta situación no hacemos oídos sordos y seguimos eligiendo vivir de esta manera, siendo docentes buenos, regulares o excelentes, pero dando día a día lo mejor que tenemos para contribuir a la formación integral de nuestros alumnos.

No se es docente por trabajar en el ámbito educativo, lo somos porque creemos en el hombre y en la sociedad y fundamentalmente en la educación como la única herramienta para lograr transformar el mundo.

Somos maestros porque nos mueve la pasión. Una pasión incontenida y que se manifiesta en lo diario, en la capacidad no solo de enseñar y aprender, sino, en poder transformarnos en enfermeros, psicólogos, cocineros, médicos, padres sustitutos, equilibristas, payasos y tantas profesiones más.

Todos los maestros aquí presentes somos un poco gitanos, nómades de la vida. Vamos de escuela en escuela tratando de dar lo mejor de uno y nos enamoramos cada día de la vocación que abrazamos. Nosotros nos vamos, y, los alumnos quedan. Esa es la certeza y ellos son los protagonistas de la historia.

Por eso, en este día no solo quiero recordar y felicitar a todos mis colegas. Quiero hacer un pedido: me gustaría que haya muchos más maestros. Vocaciones jóvenes, dispuestas a afrontar el desafío de educar hoy. Esos futuros maestros están aquí, en cada aula, en cada escuela, creciendo. Y, de nosotros, adultos, depende el desafío de hoy.

Gracias, gracias por confiar en nosotros y permitirnos la maravillosa tarea de ser parte de futuro.

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