Electricidad

La electricidad que es la sumatoria de fenómenos físicos relacionados con la presencia y flujo de cargas eléctricas, y que se manifiesta en una gran variedad de fenómenos como los rayos, la electricidad estática, la inducción electromagnética o el flujo de corriente eléctrica, mucho antes de concebirla, entenderla, y controlarla ya fluía por nuestros cuerpos y a su vez descendía de los cielos, el simple hecho de caminar ya provoca entre 200 y 300 voltios y nadie lo nota porque siempre ha estado ahí, incluso hoy solemos no percibir o darle la importancia que tiene, por la familiarización con ella, pero ahora más que nunca hace parte fundamental de nuestra vida y se podría decir que es el pilar del desarrollo social, industrial y económico de nuestra sociedad.

La vida actual tal y como la conocemos, está definida por una serie de actividades diarias, algunas vitales, otras importantes, y algunas otras, menos prioritarias, pero esenciales en nuestro vivir, que sería de un día sin la electricidad, desde cómo hacer o calentar un simple café al levantarnos, o como encender la computadora al tratar de revisar nuestros archivos, que sería al intentar cruzar una intercesión en nuestro auto sin la electricidad como funcionarían los semáforos y que haríamos sin ellos, o al querer descansar viendo un programa de televisión, nuestra vida no sería la misma sin electricidad ese regalo maravilloso que nos ha dado nuestro planeta y que al correr los años se ha vuelto indispensable en nuestra vida.

La electricidad que se ha convertido en parte fundamental de la vida moderna he inherente al desarrollo diario de nuestras actividades, y que generalmente solemos ubicar solo hace pocos siglos, siempre ha existido y es parte de la naturaleza que nos rodea, las primeras noticias que sabemos de la electricidad las podemos ubicar en el siglo VII a. C. cuando Tales de Mileto un importante pensador de la antigua Grecia, descubrió que al frotar un trozo de cierta resina llamada ámbar con un trapo, éste empezaba a atraer cosas, como hojas secas, plumas e hilos de tejido, este graciosamente pensó que el fenómeno se producía debido a un "espíritu" que se encontraba dentro del ámbar, al cual llamó elecktron de donde se deriva la palabra electricidad.

Sin embargo teniendo estos primeros destellos, ni la brillante civilización Griega, ni el poderoso imperio Romano, ni mucho menos el reciente mundo cristiano avanzaron en la comprensión y manipulación de la electricidad, antes bien esta última, absorbida por las creencias religiosas puso cadenas que impidieron los avances y en una época obscura e irracional, amordazaron la curiosidad y retrasaron el descubrimiento y desarrollo de muchas ideas, entre ellas el avance en el conocimiento y manejo de la electricidad.

Al llegar el renacimiento a Europa, también llegaron los cambios, en 1600, Guillermo Gilbert,

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