Andres Caicedo

Andrés Caicedo: El rockstar literario colombiano.

Hace tres días se cumplieron 36 años de la muerte de Andrés Caicedo y de la primera edición de ¡Que viva la música! , ¡TREINTA Y SEIS AÑOS! y aun así viva más que nunca dentro de sus lectores y se conserva como ese eterno adolescente que pudo lograr ser la voz de esa juventud tan llena de frustraciones.

¿Cómo luciría hoy, a sus sesenta años, este muchacho de pelo largo, gafas de marco grueso y sonrisa encantadora? Trato pero se me hace imposible imaginármelo de una manera distinta a la de un niño precoz cinéfilo y devorador de libros.

Hoy solo quedan las nueves obras, las cuatro novelas los veintitrés cuentos y los siete guiones de cine y teatro que escribió Andrés y su tumba luce sola y taciturna, probablemente si viviera en Cali cada cuatro de marzo lo iría a visitar aunque tengo perfectamente claro que su espíritu no se encuentra allí, se encuentra en cada página de sus obras. Hoy Cali sigue siendo esa ciudad que espera, pero que no le abre las puertas a los desesperados. Hoy nos refugiamos en sus obras, lo único que nos acerca de nuevo a todo su mundo, lo leemos con esa nostalgia de todos los 4 de marzo y debo confesar con los ojos un poco húmedos.

Nosotros los devotos a Caicedo nos refugiamos en ellos para revivirlo y revivirnos a nosotros mismos de paso, Los 4 de marzo los apasionados por Caicedo nos desboronamos tratamos de buscarlo en cualquier obra, cuento, novela o guion pero aun así en nuestra desesperación se siente una cierta tranquilidad porque a los treinta y seis años de su muerte, el delirio sigue vivo. Generaciones enteras lo seguimos sintiendo. Mientras que nosotros seguimos creciendo, volviéndonos viejos, llenos de canas, él sigue ahí, con su cerveza en la mano sonriéndole a la cámara.

¡Andrés siempre será joven!

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