“BRIDA” de PAULO COELHO

“BRIDA” de PAULO COELHO

La joven irlandesa Brida O’ Fern tiene veintiún años, vive en Dublín, Irlanda. Brida tiene novio y lleva la vida normal de cualquier joven de su edad. En su departamento realiza rituales de magia, pues tiene el secreto anhelo de convertirse en bruja, aprender magia. La asaltan dudas existenciales, acerca de la finalidad de su vida; anhela una realización personal que no duda conlleva la felicidad; presiente que la magia le dará las respuestas. Lo más inmediato para ella es confirmar si tiene el don que la hará ser bruja.

Bridava en busca de un mago conocido como "El viejo solitario de la montaña", a pedirle que le enseñe magia, pues quiere encontrar respuestas para su vida. El mago invita a Brida a tomar una copa de vino. Luego de varios vasos, se encuentran algo embriagados y deciden irse, pero terminan en el bosque realizando un ritual. Ella descubre un especial brillo en los ojos del mago, que le indican que él es su Otra Parte. Juntos realizan un viaje espiritual al final del cual terminan desnudos, abrazados y cansados. Ella acepta al mago a pesar de amar a su novio, se siente arrastrada por las profundas sensaciones que le produce el haber encontrado su Otra Parte.

El hechicero se da cuenta de que Brida es su otra parte, pero no se lo dice para proteger a ambos; lo deja en secreto porque él sabe que si ella es su otra parte de todas maneras volverá a él. Acepta ser su mentor. El mago es maestro de la Tradición del Sol, en la cual inicia a Brida. Ella deberá superar una serie de pruebas durante cuyo proceso cambiara su concepción de la vida. Descubrirá que la clave está en el amor, que es el único medio de alcanzar el mundo espiritual, porque nos transfigura, porque nos hace ser mejores.

Bridaconoce también a WICCA, maga de la Tradición de la Noche de la Luna. quien decide ser la maestra de Brida en el mundo de la magia.

WICCAconvoca al Sabbat para realizar el ritual de iniciación de Brida como Hechicera. Al entrar en trance despierta por completo su Don. La revelación le da la perspectiva real de su vida, despeja sus dudas. Puede ver que Lorens, su enamorado es su Otra Parte, y que el Mago es también su Otra Parte: descubre que no necesariamente tenemos una media naranja. Ella le pide al mago que la ame y que vivan el resto de sus vidas juntos, pero él rechaza su propuesta señalándole que ella ya tiene con ella a su Otra Parte. Le dice que a pesar de haber esperado por ese momento toda la vida, debe dejarla ir. Le explica que ella es como una flor del campo que ofrece su belleza y gracia al mundo, si él la cortara esta no lo seguiría adornando, y que él lo prefiere así. Asegura también que el simple hecho de saber quién es su otra parte lo hace sentirse realizado y feliz de haber encontrado el objetivo de su vida: él le da libertad para que sea feliz en el

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