LAS RADIOREVISTAS.

RADIOREVISTA

Como cualquier conversación de comadres, de amigos de siempre, así es la radiorevista, no es más que un formato natural y cotidiano. También se le conoce como magazine y su único objetivo es entretener y hacer pasar un buen rato a la audiencia: el contenido del magazine es amplio “Todo cabe” en este entran todos lo géneros y subgéneros en su estructura; así mismo podemos especializar los contenidos, entonces hablamos de revistas informativas, deportivas, musicales, educativas, religiosas, culturales; sin dejar por fuera que podemos enfocarnos en un tema en especial, ejemplo; una revista cultural sobre las comparsas del carnaval de barranquilla.

¿Cuál debe ser la duración del formato? Hay tres maneras de dividir el tiempo. Armando espacios de tres y cuatro horas o en cuatro revistones (Mañana, día, tarde, madrugada), también las revistas de medio tamaño cuyo tiempo es de una o dos horas y por último, las revistas que podríamos llamar ‘compactas’ con quince y treinta minutos de duración. Y en cuanto a su frecuencia se recomiendan los programas diarios para crear habito, para alcanzar día a día recepción por parte de los radioescuchas, no es necesario que la programación sea a escala, se puede hacer los sábados y domingos, eso sí, con una exquisita programación, de igual modo cabe la posibilidad de pautar la revista, los lunes, miércoles y viernes; o dos veces por semana, martes y jueves y por otro lado el pensar en revistas quincenales o mensuales, es desperdiciar completamiento el tiempo.

Los conductores de la revista deben caracterizarse por tener entusiasmo, gracia, gancho, swing, etc. . . . Todas estas cualidades pueden aprenderse, no obstante tiene que haber una base natural, que ese ‘Perrenque’ sea innato, pero y ¿Cuántos conductores se necesitan para la radiorevista? Preferiblemente uno, ya que el encontrar dos que se complementen, que compaginen, que hagan un buen juego, no es fácil pero si en caso tal se logra encontrar al ‘mello’ por así decirlo, es mejor que sea una voz femenina y una masculina, debido a que contrasta mucho mejor y también para que no exista inclinación alguna de género hacia los radiolistas por parte de los radioescuchas.

También debemos tener en cuenta algunos aspectos que deberían ser armonizados al momento de trabajar en parejas: los volúmenes de la voz, el tono alto que debes mantener los conductores a lo largo del programa, el ritmo de la locución, el lenguaje sencillo, la cantidad y calidad de intervenciones, un verdadero diálogo.

Ahora bien, resultaría fácil pensar en la opción de pregrabar la revista, pues para hacer un montaje sin baches u obtener un producto mejor acabado; pero esto no tiene sentido porque la revista es diálogo, interlocución y si grabamos no estaríamos conversando con nadie. Sin embargo, podemos contar con algunas secciones ya grabadas, como por ejemplo una cuña o una radionovela.

Y para tratar más afondo acerca de las radiorevistas, hablemos de su estructura; los dos componentes que la atraviesan son: la costumbre y la sorpresa, hay que saber complementar a ambas, la costumbre por un lado resulta buena para el programa, pues esta crea el habito de que se escuche la revista; sin embargo si ésta se apodera de nuestro programa, éste se tornará aburrido y por ende nos fastidiará, por otro lado tenemos la sorpresa o lo nuevo, los revisteros deben llegar con novedades, con temas y recursos imprevistos que exciten la curiosidad de sus oyentes. Es por esto que debemos saber jugar con estas dos piezas claves, por otro lado tenemos También la coherencia y la verdad: punto clave.

La música o las canciones ocupan el 50% o incluso más en las revistas y revistones, los discos pueden ir distribuyéndose en medio de las secciones, puede ser en secuencia o como lo prefieran los conductores, también hay que tener en cuenta el mezclar los ritmos e intérpretes, épocas y nacionalidades, además de esto acomodarse lo mejor posible a la solicitud de los oyentes.

Las secciones son espacios breves generalmente hablados donde se juegan los principales contenidos del programa, algunas son pregrabadas para poder editarlas como se debe (encuestas, reportajes, Sketches) y otras que no necesitan de edición (debates, consultorios, concursos).

Es imposible responder cuanto deben durar las secciones, puesto que estas varían, un mensaje sobre protección de los bosques puede darse en un minuto mientras que un reportaje sobre el mismo se resolverá en quince minutos y ni

Se diga los debates y acusados, con ecologistas y pirómanos, puede abarcar media hora. Lo que en verdad importa, es la mayor o menor aceptación del espacio por parte de la audiencia, en asuntos de comunicación también se aplica la ley de Einstein del tiempo relativo, “En radio, el tiempo es inversamente proporcional a la monotonía de la locución y a lo monolítico del tema tratado.”

Podemos tener en la revista secciones fijas y otras que varían, por ejemplo la información sobre los precios del mercado deberá aparecer siempre en el mismo horario. Un oyente interesado en ella, y no en el resto de la revista; sabrá cuando ubicarla. Y en aquellas que varían, podemos lanzar el concurso al inicio del programa o por la mitad. Con lo anterior vamos combinando lo habitual con lo novedoso.

En el magazine la distribución de las secciones no tienes un orden como tal, esto no tendría sentido, debido a que una revista larga, difícilmente será escuchada en su totalidad por la misma persona.

La amenidad es un formato como esto, es necesaria; por ejemplo; si un reportaje resulto muy dramático, cambiemos el ritmo del programa por algo mas ligerito, si en un espacio hablamos en el otro dedicamos tiempo a la música, de lo romántico pasamos a lo político, y es de vital importancia el sentido que los conductores le impongan a cada una de estas pauta.

Algunos animadores no se conforman con la estructura de secciones fijas y móviles, prefieres apostarle a la revista un diseño transversal, es decir; de planificar ejes o hilos conductores que crecen todo el formato con el objetivo de armonizarlo, esos “hilo” pueden ser temas como por ejemplo, el boxeo, ¿Es deporte o salvajada? Con entrevistas y llamadas telefónicas a los boxeadores, también encuestas, concursos, cuñas o un hecho circunstancial, ejemplo; el huracán Sandy, haciendo estragos en Usa. Sin embargo el principal hilo conductor, son los

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