CONDE DE MONTECRISTO
sinahi3121 de Septiembre de 2013
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INTRODUCCIÓN
Yo escogí el libro EL CONDE DE MONTECRISTO porque es una historia que me gusta, porque habla de amor, traición, y superación de un hombre a pasar de que todos le dan la espalda.
El CONDE DE MONTECRISTO es una historia de injusticia, ya que Edmundo un hombre honesto, honrado y de valores, tenía una novia con la cual quería casarse, y además el trabajaba en un barco y en el último viaje muere el capitán del barco y durante el resto del viaje lo sustituyen Edmundo. Y como en todos lados hay gente envidiosa en esta novela no es la excepción hacen una carta en contra de EDMUNDO y se la envían al procurador del rey que era un bonapartista y que estaba en conspiración en contar del rey , a causa de esto lo detienen, una vez detenido el da una dirección y el procurador del rey, quien es que lo está interrogando confirma esa dirección y Edmundo pregunta si lo conoce y él contesta que no pero sabe que es la dirección de su padre y por eso le dice que quemara la carta que es la única prueba en su contra y de dice que no habiendo pruebas no hay delito, pero cuál es la sorpresa de Edmundo que a la mañana siguiente se lo llevan a una cárcel como de máxima seguridad ubicada en una isla y es casi imposible de salir pero él con astucia se hizo pasar por su compañero de celda que ya había muerto así que cuando los guardias se lo llevaron pensando que era el finado de su compañero lo aventaron al mar y el salió del costal y logro escapar y encontró el tesoro que su amigo de le decía que existía y regresa a su lugar de origen como EL CONDE DE MONTECRISTO un hombre rico, frio y calculador que regresa en busca de venganza luego de haber sufrido injustos agravios de quienes lo traicionaron .
Además que es un libro que compre cuando iba en segundo de secundaria que me dijeron que comprara y que leyera y no pude terminar solo llegue a terminar la segunda parte de cinco que contiene y me propuse de fin terminarlo de leer y lo logre.
RESUMEN
EL CONDE DE MONTECRISTO comienza con Edmundo Dantés volviendo a Marsella, donde se encuentra con su familia y sus amigos. Dantés está a punto de recibir una promoción a capitán ya que el que era había muerto durante su último viaje, y también a punto de casarse con su bella novia, Mercedes Herrera.
Cuando Dantes termino las maniobras pidió permiso para ir a ver a su padre, novia y después de viajar a parís y todo le fue concedido.
Sin embargo, Dantés no se da cuenta de cómo su fortuna afecta a los que él considera sus amigos. Danglars, el jefe de cargamento que envidia la promoción de Edmundo, y Fernando el primo de Mercedes que ama a ésta, pretenden acusar a Edmundo como agente bonapartista; entonces crean una carta anónima, acusando a Edmundo de bonapartista y al día siguiente cuando parecía preparado para un boda sin contratiempos y la felicidad invadía a todos llega la policía del rey y con órdenes para detenerlo y llevado ante Villefort, procurador del rey. Aunque Villefort se convence enseguida de la inocencia de Edmundo y está a punto de dejarlo en libertad, descubre que el destinatario de la carta no es otro que su propio padre, Noirtier, un importante bonapartista.
Durante el encarcelamiento, Dantes comienza a desesperarse. Empieza rezando a Dios por su liberación, pero sigue sufriendo año tras año, y al tiempo intenta suicidarse dejando de comer. Al fallar en su intento de suicidio, ataca a un guardia cuando va a dejarle comida, igualmente falla y lo consideran un loco y lo trasladan a un calabozo para prisioneros altamente peligrosos. De nuevo intenta llega a una extrema debilidad física provocada por la falta de alimento pero cuando está a punto de morir, recupera la voluntad para vivir al escuchar el sonido que producía otro prisionero al cavar para conseguir escapar. Poco después se encuentra con el otro prisionero, el abate Faria, que en su intento de escapar, cavó en dirección equivocada y llegó a la celda de Edmundo, con quien forma una muy buena amistad, llegándolo a considerar como su hijo. Faria se convierte en su instructor en varios temas, desde la historia, las matemáticas, el lenguaje, filosofía, idiomas, y química, mientras ya juntos, cavan hacia otro lado de la celda, intentado escapar del castillo. Como resultado de sus conversaciones con Faria, Dantes empieza a juntar las piezas de la historia que lo condenó a su penuria actual. Faria le hace ver que la carta acusadora fue escrita con una mano izquierda y por un obvio rencor hacia él. Edmundo y Faria trabajan durante largas horas en el túnel para escapar, pero el viejo y frágil Faria no sobrevive para verlo terminado. Una noche el viejo Faria llamaba a Dantes con acento de dolorosa angustia. Dantes acudió pronto y le pidió un remedio que estaban en su celda ya que conocía sus síntomas y le conto a Dantes sus males pero esta vez le duro más tiempo que eran momentos de desesperación para Dantes. A la mañana siguiente el viejo Faria comenzó a contarle un poco de su propia historia a Dantes de donde era, donde trabajaba, y con quienes trabajaba y le conto sobre u tesoro que al final le enseño la carta del tesoro era un testamento que se encontraba en la isla de Montecristo que ascendía a lo que en esos tiempos seria 13,000,000, Al morir Faria, los guardias envuelven su cuerpo en una pesada manta, a Dantes se le ocurre ocupar el lugar del cadáver de Faria, llevando el verdadero cadáver a la otra celda. Los carceleros, en lugar de enterrar el cuerpo como él suponía, lo atan una pesada bala y lo lanzan al mar por un barranco cercano.
Dantes escapa del sudario evitando las rocas y nada hasta una isla desierta donde pasa una noche tormentosa. Al día siguiente ve en el mar un barco naufragado, nada hacia los restos y ve otro barco que lo recoge, y Edmundo se hace pasar por un náufrago a causa de la tormenta. Hace amistad con ellos, se rasura, cambia el nombre y se dedica durante un tiempo a ser contrabandista. Varias de las transacciones que hacían los contrabandistas era en la Isla de Montecristo, por ser ésta, una isla desierta, y sin ninguna atracción aparente; Edmundo en una de las transacciones que se hacían ahí dice que va de cacería pero y uno le dice que va con él y si él le decía que iba solo sospecharía y se van los dos casan un cabra y él le pide al joven que la llevase para que la cocinaran mientras él iba en busca de otra cosa. El va en busca pero del tesoro que el abate Faria le conto y la encontró era inmensamente valiosa la deja ahí y regresa cuando sus compañeros lo ven que ya venía de repente lo ven desaparecer y finge caerse de las rocas, sus compañeros lo ayudan a moverse, pero él alega que está realmente lesionado, y que no se puede mover. Con la excusa de que podría retrasar la inminente expedición de los contrabandistas, les pide que se marchen y que vuelvan a por él dos días después, una vez terminado su trabajo. Una vez que Edmundo pierde el barco de vista, se pone en pie y encuentra el tesoro.
Cuando sus compañeros del barco regresaron el se fue con ellos que decía estar mejor una vez llegando al puerto Dantes fue en busca de un judío para venderle cuatro de sus diamantes más pequeños compro una barca y se la dio a su amigo Jacob y cien piastras y dijo que fuera a Marsella en busca de información de su Luis Dantes y Mercedes. Mientras el compraba un yate y diciendo al judío que le daba mas siempre y cuando le pusiera tres divisiones al yate, una vez ya comprado y terminado regreso a la Isla de Montecristo por su fortuna.
Tiempo después, habiendo ocupado parte de la fortuna en hacerse un nombre, en investigaciones, y amasar más dinero, regresa a la ciudad de Marsella para retomar contacto con sus seres queridos, pero sólo halla desesperación. Tomando distintas personalidades, desde un abate italiano a un banquero inglés, Edmundo Dantes puede confirmar sus sospechas a través de Caderousse, (un antiguo vecino que fue cómplice de Danglars y Fernando), al que visita disfrazado de abate, fingiendo cumplir el último deseo de Edmundo. De su antiguo vecino descubre que todos los que le traicionaron han triunfado en la vida; Fernando huyo a España temiendo ser capturado por la conspiración en contra de Dantes para después convertirse en un conde y como cambio de fortuna hizo que Mercedes permaneciera a su lado para posteriormente casarse con ella y tener un hijo llamado Alberto, Danglars se hizo un barón y en el banquero más rico de París, y Villefort no sabía gran cosa solo que se había casado y después se había ido a Marsella imaginando que había prosperado como los demás conspiradores.
Mientras tanto, los amigos de Edmundo han sufrido en manos del destino. Al principio de la novela, Julien Morrel es el rico y amigable propietario de un negocio naval en alza. Pero durante el encarcelamiento de Edmundo, Morrel sufrió una trágica serie de desventuras, entre ellas el hundimiento de su barco Faraón, y en el momento en el que Edmundo regresa a Marsella no tienen nada más que a sus dos hijos, Julie y Maximilian, y unos cuantos criados leales. La compañía está al borde de la bancarrota, y Morrel piensa en suicidarse. Al descubrir esto, Dantes restituye anónimamente la fortuna de Morrel y un nuevo Faraón justo a tiempo, bajo el seudónimo de Simbad el Marino.
Diez años después de su viaje a Marsella, Dantes empieza su búsqueda de venganza disfrazándose con el nombre de "Conde de Montecristo".
Manipula a Danglars para que le dé un crédito ilimitado de seis millones de francos, y manipula la bolsa para destruir la fortuna de Danglars, cobrando los seis millones sólo cuando Danglars está al borde de la bancarrota y forzándole a huir a Italia.
Montecristo tiene una esclava griega, Haydée, cuya familia
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