ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Castllano


Enviado por   •  7 de Abril de 2013  •  2.273 Palabras (10 Páginas)  •  317 Visitas

Página 1 de 10

Republica Bolivariana de Venezuela

Ministerio del poder Popular Para la Educación

Escuela Técnica Industrial Robinsoniana

La Victoria edo. Aragua

PROCESO DE PROTECCIÓN DE LOS METALES

Integrante:

Molina, Tony Nº 15

La Victoria, mayo de 2010

Técnicas de protección

Protección de los metales. El hierro es un metal que se oxida fácilmente por la acción de la humedad, formándose poco a poco una película de óxido hidratado que debilita el hierro. En las playas marítimas también es fácil la oxidación, debido al aire iodado y las emanaciones salinas, que también lo atacan oxidándolo. Los metales se protegen de la oxidación recubriéndolos con pinturas, galvanizado, emplomado, estañado, esmaltado y con cementos.

Previo al tratamiento protector, el metal debe ser perfectamente limpiado, a fin de obtener una mejor adherencia. Para ello se los puede tratar con un chorro de arena fina a presión, cepillos de acero pasados a mano o a máquina, o con reactivos químicos, como el ácido fosfórico, que provee la industria bajo el nombre de líquidos desoxidantes; puede prepararse en solución acuosa al 10 %. Los reactivos químicos tienen la ventaja de efectuar una limpieza prolija hasta donde no siempre se puede llegar por los otros medios, debido a la forma de las piezas.

a) Pinturas. Una vez limpias las superficies, se les aplica el fondo antióxido en una o dos manos, según se requiera mayor o menor resistencia. Se emplean productos preparados por la industria a base de cromato de zinc o minio de hierro (el minio de plomo está prohibido por las reglamentaciones, por tóxico). Sobre el fondo antióxido, se aplican las manos de acabado; si las piezas han de quedar a la vista se emplean pinturas al aceite o las lacas a la piroxilina (nitrocelulosa). Si las piezas deben ser enterradas o quedaran fuera del alcance visual, se pintan con pinturas y barnices bituminosos.

b) Galvanizado. Es el procedimiento más generalizado; consiste en recubrir con una película de zinc, para lo cual y previamente limpias, se sumergen las piezas caldeadas en un baño de zinc fundido que se cubre con una capa de cloruro de amonio para que no arda; después de unos segundos se retira el hierro hasta el total enfriamiento. Las chapas onduladas de hierro galvanizado o zincado, tan comunes, son un ejemplo de este procedimiento. El galvanizado o zincado se deteriora con el hollín de las chimeneas, el agua de mar y algunas veces con la acción corrosiva de los productos sulfurosos del hierro, por lo que debe rechazarse toda pieza que presente señales de corrosión.

c) Emplomado. No es un procedimiento muy recomendable, pues el plomo adhiere poco con el hierro; menos que el zinc y que el estaño.

d) Estañado. Es algo mejor que el plomo, pero no tiene gran duración. El aspecto que da al hierro es más agradable que el del zinc o el plomo.

e) Esmaltado. Consiste en recubrir el hierro con un producto vidriado. Una vez bien limpio y seco el metal, se recubre con una capa constituida por feldespato, cuarzo, bórax y arcilla, que una vez seca se introduce en el horno hasta la fusión. Al enfriarse se aplica otra mano de terminación por inmersión en un baño de cuarzo, bórax, sosa, y óxido de zinc, plomo, etc., según el color deseado, volviendo a calentar hasta la fusión. Ejemplos de este procedimiento son las cacerolas para cocinar, artefactos de baño, etc.

f) Cementos. El recubrimiento del hierro por una capa de cemento, tiene la ventaja de no necesitar una limpieza previa. El cemento Portland posee la propiedad de absorber las pequeñas capas de óxido. Se ha comprobado en demoliciones efectuadas en la Capital Federal, que en hierros involucrados dentro del hormigón no solamente fue contenido el principio de oxidación sino que la pieza se retiró relativamente limpia de óxidos. Es útil siempre que el manipuleo sea poco, pues se descascara y no resiste la acción de los aceites grasos.

g) Niquelado. Es otro procedimiento de protección del hierro, muy usado, especialmente porque mejora mucho su aspecto.

Técnicas de recubrimiento

El fin más frecuente e importante de los recubrimientos metálicos es el de proteger a otros metales de la corrosión. Otros usos son: economizar metales caros, lograr un conjunto de propiedades diferentes que no están reunidas en un metal solo, o fines decorativos.

La mayoría de los metales, expuestos a la acción de los elementos ambientes, sufren transformaciones fisicoquímicas que los degradan, reducen su utilidad y llegan a destruirlos. Los fenómenos que originan estos cambios se agrupan en el concepto de corrosión, o, con mayor amplitud, en el de deterioración de materiales. La importancia económica de la corrosión es muy grande. El valor de sus daños y el de los medios que se adoptan para retardarla sobrepasan en el mundo los dos billones de pts. Anuales (Informe de la OECD, 1964). Los daños producidos por ella en un automóvil de turismo se cifran en 200 pts. Por cada 1.000 Km. de recorrido. El número de vidas que se pierden todos los años a consecuencia de accidentes debidos a la corrosión es elevado.

Hay varios tipos de corrosión y de procesos que a ella conducen. En términos termodinámicos, el fenómeno supone una disminución de energía libre. Afortunadamente, la velocidad de muchas de las reacciones que se desarrollan con liberación de energía es muy baja, reduciendo, de este modo, la corrosión. La mayoría (para algunos autores todos) de los procesos de corrosión caen dentro del campo de la galvanotecnia (v.). Si se introduce una lámina metálica en una solución acuosa o electrólito, tiende a emitir iones (cationes, átomos cargados con electricidad positiva), dejando sobre la lámina los electrones o cargas negativas equivalentes. La lámina queda cargada negativamente y atrae a los iones (cationes), llegándose así, para un conjunto de condiciones estables, a un equilibrio dinámico, es decir, en

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (14.3 Kb)  
Leer 9 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com