Agamemnon

"Agamemnón"

Durante el desarrollo de la obra se aprecia la manera en que Esquilo saca a relucir temas y aspectos de la naturaleza humana a través de sus personajes. Mediante la ficción, el autor plantea mensajes al espectador, para que éste reflexione sobre ellos (rasgo caracteristico del autor).

Los personajes que conforman esta historia, tienen una diversida de matices en cuanto a la personalidad se refiere. Pueden amar y odiar con pasión, son capaces de hipocresía, rencor y malicia. A pesar de la solemnidad de la obra, los personajes son muy creíbles y humanos porque actúan movidos por sus pasiones.

El coro en las obras de Esquilo es fundamental, pues recoge el sentir de los personajes y se dirige al público explicándole las historias del pasado. En está historia el coro esta compuesto por los ancianos del pueblo, "la voz de la experiencia y de la sabiduría", que conoce los crímenes de la familia (gracias al coro el espectador se entera de tales acontecimientos).

El palacio de los Atridas es el escenario en donde da inicio la historia, con una escena en la que un guía seguido por el coro, nos ubican en el contexto: "la Guerra de Troya ha terminado y Agamemnón, jefe de las fuerzas griegas, vuelve a Argos, su patria, después de haber vencido". Un mensajero confirma la noticia a su esposa Clitemnestra (personaje de una mujer altiva y justiciera, vengadora), quien aparenta júbilo y prepara la bienvenida. Agamenón llega a Argos con Casandra (profetisa e hija de Príamo, rey de Troya), condenada a ser su esclava. Aunque Agamemnón aparece como una figura heroica, Esquilo nos muestra que termina sucumbiendo a su propia soberbia. Su esposa , Clitemnestra lo recibe con palabras hipócritas y lo invita a darse un baño y a caminar sobre tapices de color púrpura (honor reservado solo a los dioses).

Agamemnón teme la reacción de los dioses, pero finalmente cede, vencido por los argumentos de su mujer y por su propio orgullo, convencido de que puede desafíar a los hombres y a los cielos. Esto termina siendo una justificación más para que Climtemnestra lo asesine, pues Agamenón ha cometido una gran falta de respeto.

Finalmente Agamemnon, el gran héroe griego, triunfador de la guerra, muere de una manera humillante (en el baño, por ello sus hijos comentan que hubiera sido mejor que muriera en la guerra, en vez de ser asesinado de manera tan traicionera) debido a un acto ocurrido años atrás que lo condenó para siempre, hecho que Casandra ya habia profetizado junto con todas las terribles escenas de la historia de los Atridas, que determinaron su destino.

Después del infortunio, Climtemnestra anuncia que ha vengado la sangre de su hija Ifigenia, a quien Agamenón sacrificó a Artemis para obtener un viento favorable que permitiera a los griegos zarpar hacia Ilión, al principio de la guerra.

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