Los Benandati

1.- Título novedoso que exprese la idea central de la lectura realizada:

“Santa” inquisición, traidora a la razón.

2.- Párrafo introductorio en el que se dé a conocer el propósito del escrito:

En este texto se busca dar a conocer los hechos que tuvieron lugar dentro de una sociedad campesina entre el periodo de finales del siglo XVI y mediados del siglo XVII, relacionados con el significado y naturaleza de la brujería popular, diferente a la polémica que el culto inquisitorial marco y difundió por toda Europa.

3.- Exposición sintética de las ideas centrales de la lectura.

El relato tiene lugar en el Friul de los años 1575-1650, en Europa. En este lugar se mezclan las tradiciones eslavas y germanas. En este lugar habitaba una sociedad feudal arcaica que a principios del siglo XVI se ve “sometida” por la Iglesia, que forma un tribunal de Inquisición en 1551.

Más pronto que tarde, los habitantes comienzan a ser interrogados acerca de sus prácticas dentro de la brujería. Sin embargo, más que parecer un interrogatorio como podríamos imaginar, el cuestionamiento gira en torno al delito mismo, siempre buscando que se reduzca por la fuerza al lenguaje erudito, siendo tal su persuasión que los acusados mismos se convencen de ser culpables de las acusaciones que se les hacen. Es entonces cuando se pierde toda la razón de la Iglesia, puesto que no sólo hacen creer a los acusados que son culpables de algún delito, sino que son culpables de lo que la misma Iglesia desea que sean.

Es así como, entre 1575 y 1680 el inquisidor de la diócesis de Aquilea y Concordia registra una serie de declaraciones que demuestran que existe un grupo llamado los benandanti, que realizan prácticas en contra de la brujería por las noches de ayuno.

El relato se desarrolla contando las diferentes declaraciones e interrogatorios, haciendo énfasis en el contraste que tienen las palabras de los habitantes locales y la Iglesia.

4.- Transcripción de tres pasajes:

* “Según el vulgo, una misteriosa divinidad (en realidad un demonio, explica Guglielmo), llamada Abundia o Satia, vaga de noche por las casas y cantinas, acompañada de sus secuaces, comiendo y bebiendo todo lo que encuentra; si halla comida y bebida dejadas como ofrenda les proporciona prosperidad a la casa y a sus habitantes, de otra manera se retira, negando su protección” .

En lo personal me encantó este pasaje porque es aquí donde se demuestra claramente que si bien la brujería era un hecho considerado terrible, a veces traía cosas buenas, como la protección, en su defecto no traía nada, bueno o malo.

* “Aun los excomulgados comen pan, y ya vendrá el perdón,

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