Tengo Un Sueño

libertad.

Es entonces cuando Luther King impacta con su discurso debido al sentimiento que provoca en los manifestantes, a quienes convoca a perseguir la justicia y los ideales de libertad.

Lo que le da a este discurso el poder de impacto tan grande que tuvo, tiene mucho que ver con la forma en que Luther King se expresa, ya que podemos distinguir sinceridad y un verdadero sentimiento de manifestación hacia los hechos que expone; o al menos eso nos transmite. Lo que hizo famoso a este discurso, fue la fuerte presencia de las palabras que de cierto modo representaban a una comunidad entera:

“…yo aún tengo un sueño. […] Sueño que un día esta nación se levantará y vivirá el verdadero significado de su credo […] Sueño que un día, en las rojas colinas de Georgia, los hijos de los antiguos esclavos y los hijos de antiguos dueños de esclavos, se puedan sentar juntos en la mesa de la igualdad. […]”

Son estas palabras las que tienen mayor carga emocional, ya que la mayoría de aquellas personas que sufrían las condiciones de discriminación (por no decir todas) compartían los mismos ideales, los mismos sueños.

Y así, estableciendo un ideal colectivo, Martin Luther King crea el sentido de esperanza en la audiencia al decir:

“Hoy les digo a ustedes amigos míos, que a pesar de las dificultades del momento, yo aún tengo un sueño”

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