Ensayo señora Dalloway

Core Literatura y Humanidades

Franco Gaytán

Sección 27

1. Durante el comienzo de la obra rápidamente se comienza a hablar de los amores que tuvo La Señora Dalloway y respectos de éstos se denota una confrontación relacionada con el amor de la juventud vs el amor para el futuro donde dado el contexto histórico de la época, además de las personalidades, el tema de los matrimonios no tenia por solo motivo el amor, muchas veces se buscaban los matrimonios buscando lograr alguna ventaja al casarse, en este caso económica y de estatus. Peter Walsh es recordado en varias ocasiones con rasgos negativos, pero destacando algunos positivos, “Peter, que carecía de corazón, carecía de cerebro y carecía de todo, salvo de modales y apostura del caballero inglés, bien cabía decir que era una de las peores manifestaciones de carácter de Peter. Peter podía ser intolerable, imposible, pero era adorable pasear con él en una mañana así” (Woolf, 12), además de éstas percepciones de parte de La señora Dalloway se le caracteriza como alguien que a fracasado o no ha logrado las aventuras que quería en la vida lo cual no aportaba mucho a la idea del matrimonio, ya que por el otro lado se encontraba el actual esposo de Clarissa, Richard Dalloway, quien era primer ministro y al casarse con él siempre sería parte de la alta sociedad inglesa, además de que compartían la manera que les gustaba llevar el matrimonio, como “Clarissa (…) todavía convenciéndose de que había acertado al no casarse con Peter. Ya que el matrimonio, entre personas que viven juntas día tras día en la misma casa, debe haber un poco de tolerancia, un poco de independencia; esas cosas que Richard le concedía, y ella a él.”(Woolf, 13). Por otro lado la confrontación guerra vs posguerra era lo que constantemente circulaba en la mente de Septimus, esto repercutía en su esposa Rezia, pareja la cual muestra problemas a lo largo de la obra debido al pasado de Septimus que había participado en la guerra, y como destacan durante el relato, a Septimus le decían que no tenia nada pero para su esposa ya era inevitable como la mente de Septimus siempre estaba en otro lugar, le era imposible hablar con él, ya no se sentía una pareja junto a él, “Mira, le invitaba lo no visto, la voz que ahora comunicaba con él, que era el ser mas grande de la humanidad, Septimus, últimamente transportado de la vida a la muerte, el Señor que había venido a renovar la sociedad , el que yacía como una colcha, como una capa de nieve solo tocada por el sol, sin sumirse jamás, sufriendo siempre (…)” (Woolf, 36).

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