CANTEMOS JUNTOS

En el contexto de la educación escolar básica, el canto coral es un medio ideal que pone a los niños en contacto con géneros de música probablemente distinto de los que escuchan en sus hogares, gracias a la diferencia y variedad de gustos que pueden tener. En estas clases se trata de brindar la posibilidad de cultivar o descubrir a buen tiempo sus capacidades musicales mediante la práctica de la audición, el uso de la voz y la coordinación rítmica. Además de que el canto coral es un excelente recurso didáctico que se puede emplear y no solo en la materia de educación artística sino en las demás.

El canto coral puede afianzar el sentimiento de fraternidad, pues desarrolla el aprecio por el trabajo en equipo y el espíritu de colaboración entre los alumnos.

La voz infantil y cualquier tipo de voz debe tener una técnica vocal para poder aplicarla al canto, esto ayuda a mejorar la articulación y la pronunciación, en los alumnos pequeños se debe establecer una secuencia de ejercicios y canciones, que impulsen al niño a descubrir su voz y segundo la secuencia ayudara al niño a desarrollar gradualmente su capacidad auditiva para apreciar la música. Durante la etapa de la pubertad se generaran cambios en cuestión al tono de voz y el maestro decidirá si es necesario ubicar a los alumnos en tipos de voz.

El maestro debe ser quien genere un ambiente donde el trato afectuoso y un entorno comprensivo animen a todos los niños a participar, aun cuando sabemos que se tienen diferentes aptitudes para el canto e inclusive gusto por ello de forma personal.

En todo momento el maestro tiene un papel importante al transmitir indicaciones a los intérpretes, como energía, vigor, apasionamiento, suavidad, que forman los matices y las características de las diferentes partes de una pieza, sin que ello signifique rechazar las variantes que el grupo proponga.

Una vez que se tiene establecida la canción y que los alumnos están familiarizados con ella, con el tono en cada sesión se debe comenzar con ejercicios de calentamiento de la voz. Aunque los ejercicios de relajación muscular y respiración se tratan por separado, se considera que constituyen una sola etapa de preparación para el canto coral.

Los ejercicios se dividen en dos; unos ayudan a eliminar la tensión o dureza en los músculos de hombros, cuello y cara. Los otros son ejercicios de respiración que ayudaran a los órganos fisiológicos implicados en esta actividad, la secuencia debe durar de entre dos y tres minutos cada una.

Después de esto se deben establecer secuencias que ayuden al alumno a vocalizar, contemplando el ritmo, la entonación, la afinación, entonación etc. Para que los alumnos entiendan que cantar no es lo mismo que gritar y aprendan a controlar y a modular el volumen o intensidad de la voz.

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