Demostron

Compleja la visión de Luis Carlos Valenzuela frente a un tema que forma parte de la vida de prácticamente todas las personas y de tanta importancia como lo es la educación, tal vez un poco radical pero a su vez realista, que aunque al final explica el porqué de su texto, nos ayuda a reflexionar sobre lo que realmente es la educación y que el conocimiento y la sabiduría no se alcanzan en un par de años de estudio, sino en un sabio vivir el resto de la vida.

El que cree que ir al colegio y posteriormente a la universidad o hacer especializaciones, maestrías, doctoraos, posdoctorados o estudiar toda la vida le va a enseñar cómo vivir, puede estrellarse con una cruda realidad que suele ser muy diferente a la que se vive en la etapa de estudio, donde todo a pesar de trabajos y el tiempo que se debe invertir, suele ser color de rosa comparado con lo que viene posteriormente.

La vida nos da la grandiosa oportunidad de educarnos y al pasar de los años la educación se hace más asequible para la mayoría de la población, que bueno tener la oportunidad de conocer sobre muchos sabios que nos han dejado tantas enseñanzas que aplicadas en nuestra vida son tan importantes y que generan muy buenos resultados.

Es verdad que comparar lo aprendido en un aula con lo que se debe aprender para alcanzar el “éxito y la felicidad” tiene una diferencia abismal, ¿quién es el que no ha necesitado de un maestro para ser alguien y darle sentido a la mítica frase “el alumno supera al maestro”?.

Si lo que se aprende con fórmulas matemáticas y teorías no alcanza para darnos solución a los futuros problemas, de algo han de servirnos, no todas las enseñanzas de la educación nos quedan para toda la vida, pero si lo que consideramos más importante y que después recordaremos por algún motivo.

A la educación no podemos criticarle nada, si a alguien hay que criticar es a nosotros mismos, pues si vamos por varios años a educarnos y al salir no continuamos con el proceso...

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