AUNQUE SEA UNA VEZ

Aunque sea una vez

Desperté acostada en mi cama como todas las mañanas, sería el primer día de clases y mamá ya estaba preparando el desayuno, creí poder encontrar en el bus a su amiga Jessica, sería divertido pasar el resto del curso escolar en la misma escuela, pero a mi papá le ofrecieron un trabajo en el extranjero y supuse que mamá y yo iríamos con él, aunque no tiene mucho tiempo la noticia de que nos mudaremos creo esta pendiente la decisión, yo lo único que quiero es llegar al la escuela y escuchar esa campana que tanto me gusta, apresúrate mamá! Le grité, aunque ella no pudiera escucharme, a algunos niños no les gusta ir a las escuela, pero a mi me parece interesante ya que sólo a eso me dedico.

Creo en mi casa últimamente hay problemas, y algunas veces he escuchado a mis padres discutir, parece ser por mi culpa, esta tarde al regresar de la escuela mamá parecía estar cansada porque esperó a mi papá hasta horas de la madrugada, a mi me venció el sueño, sinceramente no se bien como esta el asunto entre ellos pero ya no quisiera verlos pelear.

En la escuela nos dejaron investigar sobre los métodos anticonceptivos, cuando le hablé de eso a mamá se puso nerviosa, se le subieron los colores a la cabeza, sé que es un tema avanzado para mi, pero si al menos me permitiera explicarle lo importante que es informarse de su uso para todos, no sólo para los adolescentes. La convencí de acompañarme al café internet y después de terminar la tarea juntas, regresamos a casa, fui a tomar un baño y enseguida me senté en la mesa para cenar, ellos estaban enojados, no se dirigían la palabra, pensé que ya todo seria normal luego de la discusión que tuvieron la semana pasada, se supone que arreglarían sus problemas eso fue lo que llegué a escuchar cuando mi abuelita fue a mi casa, a veces quisiera taparme los oídos para no escuchar sus voces al discutir, o cuando se escuchan los gritos de mamá hasta el otro lado de la calle, creo deberían escucharme solo una vez, para que me entiendan y sepan que me duele verlos así.

Pasaron los días y las semanas pero creo sólo se empeoraban las cosas, mientras yo trataré olvidar ese asunto y concentrarme en lo que hago, ya que los últimos días en la escuela no ando muy bien, no entiendo nada, parece ser que los profesores están en mi contra ¿o qué creen? ¿el que más fuerte me grite ganará un premio? o ¿conseguirá la atención de mis padres?, que tontos eso ni yo lo puedo hacer. En fin, mis “amigos” y yo planeamos un convivio para este fin de semana, solo asistirán unos compañeros por que no todos tienen el permiso de sus padres, quien como yo, que hubiera preferido ser educada en casa sólo con la condición de estar más tiempo con mis papás que me pusieran cinco minutos de su atención, seguro que mamá ni siquiera sabe los días que voy a la escuela, o que mi papá no sabe el día de mi cumple, quizá eso me pondría un poco feliz, pero… ¿qué necesito yo de ellos? si ellos no necesitan de mí.

Llegará viernes y saldré como todas las mañanas de casa, esperaré el bus en la esquina y llegaré a charlar con Jessica, hace tiempo que la conozco, y me parece es la única amiga que tengo, es que no me gusta socializar demasiado, la gente suele ver de una manera extraña sin saber nada de los demás y yo conociendo todo de ellos, basta con mirar sus ojos y saber por lo que pasan, ese truco me lo enseñó papá, o ¿así lo imaginé yo?, cada vez que yo mentía el se daba cuenta en mi mirada y siempre acertaba a las respuestas correctas, debería tener más cuidado con él, mamá sin embargo es diferente, si le hecho el choro mareador no tendré problemas y si pregunta algo respondo con otra cosa para que cada vez la enrede más y ya no tenga que preguntar. Los únicos días que los veo son para la entrega de calificaciones ¿o eran?, por que ya no estudio mucho que digamos, o a veces en las noches si aún estoy despierta para cenar.

Como decía… llegó viernes y salimos de la ciudad a buscar un lugar donde podríamos disfrutar de la comida y del lindo paisaje para convivir mis compañeros y yo, parecía todo estar bien hasta que uno de los amigos de Jesi, me parece que su nombre es Sergio, sacó de su mochila una botella de licor, nunca he tomado ni una sola copa y mira que si he tenido muchas oportunidades, no quisiera cometer un error, pues he leído en algunas revistas que afecta el sistema nervioso y otros órganos, estaba preparada para decir que no, pero mi boca dio otra respuesta cuando me preguntaron que si quería probar, no lo puedo creer bebí más de cinco copas seguidas, bueno usamos vasos desechables pero para mi era la primer copa que bebía, al transcurrir las horas me empecé a sentir mareada, empecé a recordar mi pasado, sentí la necesidad de soltar unas lágrimas, pero el vómito llego primero, arruiné la blusa que llevaba puesta y ahora ya nada me importaba.

No recuerdo más, todo había pasado tan lento pero muy acelerado a la vez, la tarde se fue rapidísimo y la noche ya estaba a la vuelta de la esquina. Desperté recostada en el sofá de la casa de Jesi, pensé que alguien tuvo que hacer algo por mí la noche anterior y así fue, para mi fortuna tengo la mejor amiguix del mundo, cuando estaba dispuesta a pararme, en el techo se me figuró la cara de papá que decía: - Mírate en un espejo, ¿segura que quieres eso para ti?, pensé que en realidad querías cambiar las cosas, pensé que eras diferente a tu madre- bla… bla… bla… quien sabe cuantas veces me lo había repetido que ya lo tenía presente como una oración, salté del sofá y me acerque a la puerta que me dirigía a la recámara de mi amiga, escuché que dos personas hablaban en voz baja, me acerque un poco más y distinguí las voces, era Jesi y su mamá que discutían sobre mi estado, me alejé de la puerta, luego de la sala hasta salir de su casa. No dije adiós por falta de educación, si no que era la mejor opción, aún con la cabeza dándome vueltas, despeinada, desarreglada y principalmente con mucha hambre, empecé a vagar por las calles a las 7:00 a.m. para llegar a casa, a pesar de todo había una buena noticia ¡era sábado! y no me agarraría la tarde, de hecho tenía todo el día para descansar de la pesada semana de clases.

Creí que las cosas empeoraría con mi comportamiento del viernes, por que aunque no me vieron llegar a casa, supieron que estuve fuera esa noche y que estaba perdida en alcohol, ¡lo supuse! ...mamá de Jesi les avisó por una llamada telefónica, nadie se atrevía a visitar mi casa, quizá por que parecía estar tan deshabitada, solo me visitaba algunas veces mi abuela y la “Doña” la señora con la que empecé a trabajar hace unos días, creo era la salida a mis problemas. Bueno cambiando de tema, lo pasado ya quedo atrás y empiezo otra semana más.

Pasó un mes, tiempo suficiente para que me diera cuenta que todo dependía de mis acciones y que sólo yo tenía el control de mi vida, así que cuando empezaron a echarme el choro mareador de la escuela, de mis inasistencias y todo el rollo, tomé mi MP3 y puse la rola que más me gusta “I don’t love you” de mi banda favorita MCR, uno de vez en cuando debe darse sus gustitos, ellos ni siquiera se dieron cuenta que no les prestaba atención, ¿porqué habría de hacerlo si ellos nunca me regalaron en 14 años ni cinco minutos de su vida?, así pensé ojo por ojo y…

Mi vida no es tan complicada, sólo laboriosa, a ver…en las mañanas tomar una ducha, desayunar , ir a la escuela, divertirme en el receso… y en las clases también, llegar a casa, comer, salir a la calle a buscar amigos, en realidad ir a la casa de Jessica y leer las revistas semanales que tanto nos gustan, ver nuestra película favorita una y otra vez, hablar un poco de la escuela, mejor dicho de los chicos, mirar las nubes toda la tarde tiradas en el césped, regresar a casa, cenar (si la coda de mi amiga no me invitó), checar mis libretas y no hacer la tarea, eso es lo más entretenido, también tratar de llenar mi mochila con porquerías para disimular la salida por la mañana, como lo dije mi vida es laboriosa y no me quejo tanto.

Comencé a pensar detenidamente, que ya me debería de poner las “pilas” en la escuela, en mi casa, con mis cosas personales, por que ya no encontraba la diferencia entre un basurero y mi cuarto, ni siquiera encontraba nunca el par de mis calcetas. Principalmente quería cambiar la rutina con mis padres por que casi nunca convivo con ellos, no cambiar por deber u obligación esta vez era especial, no me gustaría hacer lo que ellos hacen conmigo, cuando yo sea grande educaré a mis hijos de la mejor manera, no sólo les hablaré de escuela, les preguntaré lo que les gusta hacer, lo que siente, lo que quieren, aclararé sus dudas, cuidaré de ellos, seré responsable con mis obligaciones y pasaremos mucho tiempo juntos, les brindaré todo lo que mis padres no me pudieron dar: “ATENCIÓN”.

Me pregunto ¿qué tan difícil es ser padre?, me pregunto si alguien aclarara mi duda. Hoy decidí ser diferente, cambiar para mi bien y no por lo que los demás esperan de mí, aunque creo a nadie le importo, no me parece justo dar y siempre esperar algo a cambio, se supone que si lo quieres hacer es de voluntad o de corazón, ya sea la situación, es por que te interesa y por que sabrás que lo que haces esta bien, sin que nadie te lo diga, sin que nadie te ordene.

Me dirigí hacia el cuarto de mamá, no estaba ahí, luego fui hacia la recámara de papá… tampoco se encontraba, si… dos cuartos porque hace tiempo que eso ya no funciona como pareja, al final opte por buscarlos en la sala pero, tampoco estaban. Decidí esperar sentada en el sillón viendo la televisión. Amaneció y ellos nunca llegaron.

Escuché que alguien llamaba en la puerta, reconocí los gritos de la “Doña”, ni si quiera alcance a ponerme los zapatos y me dirigí a la puerta para recibirla… ella dijo: - ¿Qué esperas chamaca? es sábado y te toca esta vez - yo le contesté que no me había dado cuenta de la hora, que me disculpara, pero insistió en seguir regañándome, dijo: -¡si! Como eres tan distraída voy a tener que buscar a otra “chavita”- le dije que no lo hiciera, que no volvería a pasar, pero mis palabras fueron en vano, entones escuché de sus labios:

-Eres una tonta, nada sabes hacer, pero ¿qué podría esperar de ti? si no eres mas que una buena para nada, por algo estas sola, pero tú que sabes de compañía si tus padres están muertos, eres una huérfana, te estás volviendo loca con esa obsesión, sólo recuerda que nadie aquí te mira con respeto, ni te trata bien, porque tu vida es miserable, no vas a poder cambiar tu historia, ¿a quién rayos quieres engañar? ¡mírate! No deberías de estar aquí, porque no me haces el favor de no estorbar en el camino de los demás!!

Me dolieron tanto sus palabras que, sólo le azoté la puerta en la cara y me metí a llorar en lo más profundo de mi recámara para que nadie escuchara mis llantos, pero…basta de mentiras hablaré con la verdad, le diré un te quiero a las personas que he olvidado por un tiempo, a mis padres que sin estar presentes se que ellos están dentro de mi corazón, que cuentan conmigo y que siempre he amado a pesar de lo rebelde y grosera que me he portado, espero entiendan que sólo necesitaba un poco de atención, a mi gran amiguix que me protege, que cuida de mi, agradecer tantas cosas que tengo pero que no son ciertas a la vez.

Padres, cuanto me hubiera gustado tenerlos, abrazarlos sólo una vez, darles un beso en la mejilla, tomar su mano en una noche lluviosa de truenos, salir al parque y jugar con ellos, ver el sol todos los días y mirar la luna todas las noches, asistir al cine, zoológico, circo o algún otro lugar donde pudiera presumirlos con los demás niños, preparar la comida para un día de campo, reír a carcajadas de un chiste sin sentido, compartir la mesa en todas las comidas, mirar la televisión por horas y horas, leer un libro antes de dormir, festejar mi cumpleaños o una fecha especial, dejar que las gotas de la lluvia tocaran nuestros cuerpos sin importar que nos enfermemos, dejarme tener una mascota en casa, hacer de mi vida un cuento de hadas, compartir momentos inolvidables y estar por siempre unidos, les prometería ser la hija ideal, no ser rebelde ni grosera.

Pero ya es tarde y no puedo regresar el tiempo, ahora tirada en el alcohol sentada en ésta mesa esperando que alguien llegue a decirme te quiero, el te quiero que esperé hasta el día de hoy, y que seguro no tendré jamás, por que cuando fue posible yo sólo estaba dentro de ti mamá, solo así los conocí, supe que eras bella, por dentro y por fuera, vi como eras papá, como trataste a mamá por mi culpa, comprendo que les causé problemas y que no me esperaban como yo los esperaba ver a ustedes, pero ¿qué?¿ estaba yo pintada? Aún estando sólo en tu vientre escuchaba sus platicas, siempre estuve con ustedes, aunque sea una vez, si yo regresara el tiempo, desearía que jamás se hubieran conocido, que no fueran tan irresponsables con su vida, que al menos conocieran el verdadero amor, para no causarles tanto daño, mamá te agradezco por dar tu vida a cambio de la mía, de que sirvió si estoy sola, de que sirvió si papá me abandonó cuando se enteró de tu muerte, sólo me queda decir que soy la persona mas afortunada que algún día soñó con tener una familia, llena de ilusiones, mi vida es un cuento que no tubo principio ni final, por que ustedes eran lo mas anhelado, eran la esperanza que tenía para luchar , como desearía regresar el tiempo.

Despertaría como todas las mañanas, con el reloj sonando debajo de mi almohada y los rayos del sol entrando por mi ventana, sabiendo que mamá estaba ya preparando el desayudo, que empezaría un día de clases de un nuevo curso, que lo más importante estaba en mi casa y no haya afuera, prometería a mamá llegar a la hora de la comida para compartir la mesa con mi familia, con esa familia que tanto quiero pero que solo vivirá en mi corazón por siempre.

Que la vida fuera eterna, sería el próximo deseo que pediría al soplar las velas de mi pastel de cumpleaños, falta un día para pedir ese deseo pero… de que sirve si no están aquí, si nunca los conocí en persona, si están muertos, yo sólo quiero decir los amo…aunque sea una vez.

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