BIOGRAFIA DE PABLO

BIOGRAFÍA DE PABLO

Nació en Tarso, importante ciudad de Cilicia (Hechos 21:39; 22:3). Sus padres eran hebreos, probablemente de la rama farisea (Hechos 23:6, Filipenses 3:5). Era ciudadano Romano de nacimiento (Hechos 22:28). Era de una familia importante (Hechos 22:3, 5:34). En Jerusalén, vivía una hermana y un sobrino (Hechos 23:16-22).

El apóstol Pablo tuvo el privilegio de escribir la mayor parte de los libros de las Escrituras Griegas Cristianas. Recibió visiones sobrenaturales (2da Corintios 12:1-5), y habló muchas lenguas extranjeras mediante la acción del Espíritu Santo (1era Corintios 14:18).

La primera vez que el registro bíblico menciona a Saulo o Pablo hace referencia a él como el “joven” a cuyos pies dejaron sus prendas de vestir los falsos testigos que apedrearon al discípulo cristiano Esteban, y debido a su celo mal dirigido por la traición, inició una campaña de persecución violenta contra los seguidores de Cristo. Extendió su persecución a otras ciudades, además de Jerusalén, hasta conseguir autorización escrita por el sumo sacerdote para buscar a los discípulos de Cristo, incluso en Damasco (Hechos 8:1,3; 9:1,2; 26:10,11 y Gálatas 1:13,14).

Cuando se acercaba a Damasco, Cristo se le reveló en un luz brillante y le comisionó para que le sirviera y fuera testigo de las cosas que había visto y aún estaba por ver.

Pablo entendió las palabras y fue cegado, por lo que se hizo necesario llevarlo de la mano hasta Damasco (Hechos 9:3-8; 22:6-11; 26:12-18). Durante tres días no comió, ni bebió. Mientras oraba en la casa de cierto Judas, contempló en una visión al discípulo Cristiano Ananías que iba y le devolvía la vista, cuando la visión hizo realidad, Pablo fue bautizado, recibió el Espíritu Santo, comió y cobró fuerza (Hechos 9:9-19).

Pablo pasó tiempo con los discípulos de Damasco e inmediatamente empezó a predicar en las sinagogas de esa ciudad.

Luego se vio obligado dejar a Damasco debido a un complot contra su vida. Por otro lado, la carta de Pablo a los Gálatas dice que después de su conversión fue a Arabia, para más tarde regresar a Damasco (Gálatas 1:15-17).

Cuando llegó a Jerusalén; es posible que los tres años mencionados en Gálatas, pablo se encontró con que los hermanos no creían que fuese un discípulo de Jesús. Sin embrago, Bernabé vino en socorro de él y lo condujo a los apóstoles. Mientras estuvo en Jerusalén, habló intrépidamente en el nombre de Jesús. Cuando los hermanos se enteraron de que por esta causa los judíos de habla griega intentaban matarlo, lo llevaron a Cesárea y lo enviaron a Tarso (Hechos 9:26-30; Gálatas 1:18-21).

Pablo tuvo una visión sobrenatural tan real que no supo si había sido arrebatado al tercer cielo en el cuerpo o fuera del cuerpo (2da Corintios 12:1-4). Más tarde, Bernabé llevó a Saulo de Tarso a Antioquía para que ayudara en la obra entre las personas de habla griega.

Después de un año de trabajo en Antioquía, la congregación envió a Pablo y a Bernabé a Jerusalén (Hechos 11:22-30). Acompañados por Juan Marcos, regresaron a Antioquía

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