Entre la fe y la esperanza

ENTRE LA FE Y LA DESESPERANZA

 uno de los mundos que más ha obtenido de la mujer, pero que menos ha recibido recíprocamente probablemente, es el de la religión. Por ejemplo, es muy conocida la historia de santa margarita de Hungría:

"tomando encuentra de su extraordinaria mición, la joven princesa Margarita de Hungría se dedicó con fervor a recorrer el camino de la perfección. La ascetismo conventual del silencio,soledad,oración y penitencia ser armonisaron con un celo ardoroso por la paz, con un gran valor para denunciar las injusticias y con una gran cordialidad con sus compañeras a los que servía con gozo en los más humildes quehaceres.

Su vida de piedad se cualificaba por la devoción al espíritu santo, a Jesús certificado, a la eucaristía y a Maria

Amar a dios, no despreciar no juzgar a nadie, estas razones se fija aron en el corazón de la santa 😇 princesa. Salió de esta doctrina tan gran maestra, que cuanto trataba y pensaba. Era amar a dios ya estimar a los otros; sobre este fundamento levanto el edificio de les virtud y perfección.  De la virtud de humildad hizo provicion; en el monasterio no había persona más humilde y sencilla que margarita.

Es indudable que el ejemplo de la santa mencionada anteriormente, primeramente dedica enteramente todo su tiempo al contacto con dios, pero no el tiempo entendido como cronos, sino el tiempo que los griegos entendían como kairos, el tiempo dedicado total y enteramente a dios; no áquel tiempo cronos que es pasajero, sino aquel tiempo que es eterno o lo que se denominó posteriormente el momento de dios. Llego a conjugar su razón en el amor a su Dios, explícita su fe desde su razón en su dios,  abre sus ojos a la virtud en el servicio a los demás, se gasta en su vida contemplativa por el sufrimiento de los otros que le duele desde si propia experiencia de su dios.

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