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Los Cragones


Enviado por   •  15 de Agosto de 2013  •  1.906 Palabras (8 Páginas)  •  236 Visitas

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Existen dos formas de ver el mundo y lo que existe en el universo.

1. Lo que existe en el universo parece orquestado, está organizado y funciona como funciona un reloj, con sincronización perfecta para hacer la vida del hombre en la tierra posible. Esta organización sugiere que un ser inteligente pudo haber diseñado todo lo que existe y lo que vemos hoy, por tanto, es fruto de su diseño. A ese Diseñador se le llama Dios. Como fruto de su Diseño, nosotros, los diseñados, debemos de alguna forma tener contacto con nuestro Diseñador. Ese modo de ver el mundo lo denominamos "Modo de ver el mundo Cristiano."

2. El otro modo de ver el mundo es creer que toda la organización en el universo y en la tierra fue y continúa siendo fruto del azar, de la suerte. Al transcurrir los miles de millones de años, la materia se creó a sí misma a partir de la nada y se ha organizado a través de un proceso gradual dando como resultado el complejo sistema universal y viviente que hoy observamos en el universo. Debido a que aunque existe un diseño, este modo de ver el mundo excluye la necesidad de ver a un "Diseñador" como un componente necesario detrás del diseño. Todos somos frutos del azar y en el futuro terminaremos en la nada, tal y como era antes de la existencia. Este modo de ver el mundo es el que se denomina como "Modo de ver el mundo evolucionista/ateísta"

El primer modo (Cristiano) afirma que Dios creó todo lo que existe hace unos 6,000 años. Esto incluye a los dinosaurios. En otras palabras, si esto es así, el hombre y los dinosaurios debieron haber coexistido.

El segundo modo (evolucionista/ateísta) afirma que los dinosaurios existieron y se extinguieron hace cientos de miles de años y que cuando el hombre evolucionó a partir de formas inferiores, ya los dinosaurios se habían extinguido. En otras palabras, si esto fue así, es totalmente imposible pensar que el hombre y los dinosaurios hayan coexistido. A continuación les presentaremos algunas consideraciones. Usted decide:

"Y esto que les he escrito, podría ser suficiente para satisfacer cualquier hombre razonable de que existen serpientes voladoras (Pterodáctilos) y dragones (Dinosaurios) en el mundo."

Edward Topsell, 1658

(Ver reseña biográfica de la Enciclopedia Británica).

Paréntesis míos. DAU.

Existe escasa información acerca del contacto entre el hombre y los dragones (nombre que se le daba a los Dinosaurios en la antigüedad). El nombre fue cambiado de Dragón a Dinosaurio en el año 1822 por un doctor inglés llamado Gideón Mandell, quien encontró gitanescos huesos enterrados (fósiles) de lo que evidentemente eran enormes reptiles y debido a su tamaño y debido a los inmensos dientes que algunos tenían, los llamó "Dinosauria": Dino = Monstruoso; Sauria = Reptil. A partir de ese momento, a lo que antes se conocía como dragones, a partir de ese momento se le comenzó a llamar por su nombre científico: Dinosaurios = Reptiles monstruosos.

Sabemos que para los tiempos del período más temprano de la civilización Egipcia, se había desarrollado una importante secta de adoración a los dragones en Egipto. Contamos con documentos procedentes de la antigua Babilonia, de las civilizaciones del Oriente, de las Islas del Pacífico y hasta del continente Americano que nos hablan de los asombrosos poderes y habilidades que estos inmensos animales tenían. La civilización china, por ejemplo, estaba tan familiarizada con estos dragones, que cuentan con miles de dibujos que datan de hace unos 3 años, describiéndonos clases varias de dinosaurios: Alados, cuadrúpedos y acuáticos.

Encontramos historias de hombre valientes, guerreros, siendo contratados por poblaciones para que vinieran a pelear y a matar al terrible dragón que echaba fuego por la boca o que bloqueaba el camino entre poblaciones.

Los dragones eran especialmente comunes en las montañas de Escandinavia. Uno de los más temidos de estos dragones era uno llamado Nidhoggr, o el de las "mordidas amargas temerosas". Este dragón vivió por miles de años según las historias que aún sobreviven.

Sin embargo, la mayoría de los dragones de Escandinavia eran gigantescas criaturas de las aguas que vivían en las proximidades de las costas y cerca de las desembocaduras de los ríos. Se dice que losdragones acuáticos, o Krakens, levantaban sus enormes cabezas y sus largos cuellos desde el agua y que se llevaban a los marinos de los barcos.

Los Escandinavos temían tanto la ferocidad y el dominio territorial de estos dragones que colocaban cabezas de dragones (plesiosaurios) en los extremos de sus embarcaciones.

A menudo se reportaban embarcaciones totalmente hundidas y sus cargas y su tripulación totalmente perdidas. Estos incidentes se atribuían a ataques de dragones.

Por su parte los Griegos creían que los dragones eran fuentes sagradas de gran conocimiento y habilidades. Los romanos se unían a los griegos en estas creencias.

A muchas serpientes se les denominaba "Dragones Serpientes", las que hasta se usaban para guardar los templos. A menudo se tenían inmensos Pitones haciendo estas tareas. Un Pitón guardaba el Templo de Delfi, hasta que Apolo lo mató, dice la leyenda.

Otro dragón era llamado Ladón, el que se suponía que fuera muerto por el dios Hércules.

Se suponía que animales fuertes y que lanzaban fuego por la boca, virtualmente imposibles de matar, eran ideales para cubrir las entradas de misteriosos escondites de tesoros.

Los dragones se convirtieron en un reto para los hombres de valor probar que lo eran. Así comenzó una cacería insistente contra todos los dragones que se pudieran encontrar, ya que el que mataba a uno de estos inmediatamente se convertía en una celebridad.

Con el ocaso de las civilizaciones griegas y romanas, muchos de los datos históricos de encuentros con dragones se fueron convirtiendo en leyendas usadas para traer tiempos

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