Cómo Sanarr una Auttoesttiima Herriida

Cómo Sanarr una Auttoesttiima Herriida

Semana del 30 de septiembre al 6 de octubre

La autoestima puede definirse como el sentimiento de aceptación, aprecio y valor que uno tiene de si mismo. La visión que tenemos de nosotros, es influenciada en gran parte por el valor que nos transmiten las personas más importantes de nuestra vida (padre, madre, hermanos, amigos, esposo(a), etc.). Según se hayan comunicado estas personas con nosotros, así van a ser los ingredientes que se incorporen a nuestra personalidad, conducta, y manera de relacionarlos con los demás. Si sus acciones y palabras fueron negativas pudieron haber herido nuestra autoestima. La autoestima pudo haber sido dañada o afectada por eventos en nuestra infancia, adolescencia, y edad adulta. Estos eventos pudieron ser múltiples: maltrato psicológico, maltrato verbal, humillaciones, agresión física, abandono, ausencia de padres, impedimentos y discapacidades físicas, comparaciones humillantes, pérdidas no esperadas, violación, abuso sexual, fracasos, malas decisiones, divorcio, etc.

La verdad es que muchos de los que tienen baja autoestima no la causaron, y no desean tenerla, pero se sienten impotentes para cambiar cómo se sienten. Si estás cansado de sentirte “menos que”; si tienes miedo de actuar y hacer realidad tus sueños; si sientes que hagas lo que hagas, el fruto de tus acciones nunca es “bueno”, entonces, necesitas saber: Cómo sanar la autoestima herida en tu niñez o adolescencia y mejorar tu calidad de vida.

Para comenzar a sanar a ese niño/a que quedaron escondidos y heridos en nosotros, tenemos primero que desaprender lo negativo que nos inculcaron. Esto lo logramos reemplazando las viejas ideas negativas que construimos, por afirmaciones positivas y sanas. Segundo, hay que decidirse a perdonar a quien haya causado la herida o la mala influencia. El perdón es una llave milagrosa que desata el alma y la vida emocional de influencia negativas y sentimientos de amargura. Por último, tenemos que aprender a descubrir, valorar y a afirmar las cualidades que poseemos. Ya que no hay manera de elevar la autoestima, si constantemente menospreciamos nuestras aptitudes y capacidades. Dios te creó con los recursos internos necesarios para lograr el crecimiento y desarrollo de tu ser.

La resiliencia es la capacidad que posee un individuo frente a las adversidades, para mantenerse en pie de lucha, con dosis de perseverancia, tenacidad, actitud positiva y acciones, que permiten avanzar en contra de la corriente y superarlas.

E. Chávez y E. Yturralde (2006)

La resiliencia es un proceso dinámico que tiene por resultado la adaptación positiva en contextos de gran adversidad.

Luthar (2000)

La resiliencia distingue dos componentes: la resistencia frente a la destrucción, es decir, la capacidad de proteger la propia integridad, bajo presión y, por otra parte, más allá de la resistencia, la capacidad de forjar un comportamiento vital positivo pese a las circunstancias difíciles.

Vanistendael (1994)

La resiliencia se ha caracterizado como un conjunto de procesos sociales e intra-psíquicos que posibilitan tener una vida «sana» en un medio insano. Estos procesos se realizan a través del tiempo, dando afortunadas combinaciones entre los atributos del niño y su ambiente social y cultural.

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