EL PROBLEMA El tabaquismo

EL PROBLEMA

El tabaquismo es uno de los principales problemas de salud en el mundo, y especialmente los países económicamente más desarrollados, aunque actualmente en los países en vías de desarrollo también se da el problema del tabaquismo; actualmente se encuentran en la fase III del modelo teórico de la epidemia del tabaquismo, caracterizada por un incremento del consumo en las mujeres, un descenso importante de los varones y un aumento de la mortalidad atribuible en ambos sexos, mayor entre los hombres

En los últimos años, se ha producido una reducción de la prevalencia global de tabaquismo; sin embargo, se observa un incremento del consumo de tabaco entre las mujeres más jóvenes, es decir, en los grupos en edad reproductiva. En relación con el consumo de tabaco durante la gestación, a diferencia de otros países latinoamericanos, en Venezuela existe un consumo de tabaco muy extendido durante el embarazo. Estudios previos en población muestran que una de cada tres mujeres son fumadoras en el momento de saber que están embarazadas y, a pesar de que es conocido que el consumo de tabaco supone un riesgo para la salud del feto, no todas las gestantes abandonan el tabaco durante el embarazo: aproximadamente entre el 25-50% de ellas dejan de fumar, con una importante tasa de recaída (50-80%) durante el año siguiente al parto.

Con respecto a las repercusiones fetales, es bien conocido el efecto del tabaquismo sobre el peso del recién nacido (en adelante RN), con una relación dosis-respuesta, es decir, a mayor número de cigarrillos consumidos, menor peso al nacer. Este hecho se observa desde hace tiempo en la práctica diaria, donde los hijos de madres fumadoras pesan al nacer, aproximadamente, de 15 a 250 g menos que los hijos de madres que no han fumado durante la gestación.

Si bien el tabaquismo se asocia a una menor somatometría, estos recién nacidos no presentan desproporción corporal, por lo tanto, son retrasos de crecimiento simétrico que conlleva mayores tasas de complicaciones neonatales y de rehospitalización en el primer año de vida. En cuanto al depósito de la masa grasa, estimada por la medida de los pliegues cutáneos, no hay un acuerdo unánime en los resultados publicados en la literatura.

Cabe decir, que dados los efectos perjudiciales del tabaco para el RN, se ha descrito el embarazo como una ventana de oportunidad para realizar intervenciones sobre tabaquismo, asumiendo que es un momento de especial motivación para las mujeres. Naturalmente, fumar también es perjudicial para la salud de la mujer: las mujeres fumadoras tienen un riesgo mayor de padecer cáncer de pulmón y de otros tipos, enfermedades cardíacas, accidentes cerebro vasculares y EPOC. Dejar de fumar no solo disminuye los factores de riesgo para el bebé sino que además contribuye a mejorar la salud de los padres y les permite

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