Es posible

ES POSIBLE… Por: Mefe.

Porque soy «profesora»

Quienes somos profesores hemos asumido la responsabilidad de contribuir al pleno desarrollo de los alumnos y el compromiso por impulsar a cada uno de ellos en un mundo como el nuestro. Sabemos que los alumnos, son las personas más importantes y por las que nuestras acciones como las de las personas que conviven cerca de ellos: secretarias, personal de intendencia, la señora de la papelería, el personal de la cafetería, la mujer de la “tiendita” y todos los demás… de una u otra forma somos parte de su educación.

Ser profesor, es posible porque fomenta la con-vivencia de las diversas formas de ser y pensar, reconociendo que el conocimiento se hace todos los días y que es imposible “saberlo todo”, porque los valores universales como la paz, la tolerancia, la justicia…son y serán siempre posibilidades de conocimiento.

Ser profesor, es posible desde el momento en que se que da origen a las acciones ético-profesionales, en primer lugar por enseñar a aprender; en segundo por las acciones que impulsan «una forma de ser».

Ser profesor, es fortalecer día a día con base en la tolerancia y el respeto por la otredad, el viaje por la vida en compañía de otros; en el tránsito por la re-construcción del conocimiento, en la participación determinante en el aprendizaje, aplicación y re-elaboración del saber y las respuestas a

los preceptos universales del desarrollo humano.

Ser profesor, es posible porque las acciones más importantes perfilan el compromiso de dejar de hacer más de lo mismo y nos convoca a participar decidida y responsablemente, con el único fin de ser mejores que antes.

Ser profesor, es posible porque a pesar de los problemas internos y externos que enfrentamos es viable que la solución sea de todos o de ninguno; es posible porque la respalda el trabajo que se realiza en cada una de las aulas, coordinaciones, departamentos o áreas de trabajo, todos los días de la vida, trabajo gracias al apoyo decisivo de unos con otros.

Ser profesor, es una forma de vida, de ser y hacer, que disiente y consiente con un designio concreto: hacer posible ser llamado profesor.

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