Gika

Gika! –se escucho unos grito de una voces al final del pasillo en un solo tono- gracias a dios que estas bien, porque nadie avía dicho nada?, porque no te comunicaste conmigo…

Estas últimas líneas fueron dichas por una chica alta casi una cabeza de altura mas que yo, de cabello negro hasta los hombros, con un aspecto que jamás aprobaría pero que por alguna extraña razón no me avía parecido que le quedase mal, me estaba dando un abrazo y tan efusivo que yo lo único que atine a hacer es con un brazo corresponderle, me sentía un tanto… segura y mas tranquila por aquel abrazo propiciado por una desconocida conocida-conocida…

-E-estoy bien… así que tranquila –dije esto último para consuelo de la chica, quien al oír aquello me abrazo mas fuerte casi permitiendo sentir el latido de su corazón que parecía se le saliese- y-ya casi no puedo respirar…ah!

-OH! Lo siento, es solo que… estaba muy preocupada –dijo esto último con una lagrima recorriendo su mejilla- no me hablabas ya ha pasado una semana, pensé que estabas molesta y luego me entero que estabas en el hospital y y y pensé que te perdía- después de decir esto empezó a llorar aun mas dejando caer sus lagrimas.

Yo no savia exactamente que hacer, me partía el alma verla asa no aguante mas y acaricie su cabeza sin saber que mas hacer acaricie su cabeza que quedaba un poco lejos de mi actual altura aunque ella esta inclinada no dejado ver su rostro, mi instinto decía abrázala y… bésale?... que era ese pensamiento pero mi razón decía NO LO HAGAS, ACASO NO VEZ A TU ALREDEDOR!

-Y-yo perdóname, por favor nunca fue mi intención acusarte es solo que soy indecisa y –continuaba diciendo esta clase de escusas y yo sin entenderlas- es solo que yo, yo te am…

-Yo no recuerdo quien eres -interrumpí abruptamente antes de que la chica terminara esa ultima frase , al darme cuente de lo que iba a decir frente a mi madre, quien al oír y ver esa escena no paraba de abrir los ojos cada vez mas casi parecían salírseles de su órbita y darle otro infarto- discúlpame, pero a decir verdad no recuerdo nada antes del accidente y… no tengo idea de que es de lo que hablas –dije esto último sin medir mis palabras.

Y al parecer a la chica le afectaron mucho claramente vi que su expresión cambiaba abruptamente, a un semblante serio lleno de dolor y decepción las otras chicas que le acompañaban se le acercaros.

-C-como que no recuerda –pregunto una chica más o menos alta de tés clara con una pequeña en brazos- y a nosotras no nos recuerdas, no te creo- dijo esto arqueando una ceja con cara de frustración.

-No, es verdad, por lo que me han dicho cierta… parte de mi cerebro se bloqueo y… no recuerdo muchas o casi la mayoría de las cosas –dije tocando la cabeza para mostrarles la herida que tenía en la parte de entre la nuca y cabeza- duele un montón al tratar de recordar… pero solo reconozco a una de ustedes, s-si no me equivoco eres Azul, cierto, tu acudías conmigo en la primaria estuvimos 6 años en el mismo grupo y casi no hablábamos.

-Así es –camino a mi encuentro y me abrazo- pero después de entrar a la secundaria nos convertimos en las mejores amigas y desde entonces no hay nada ni nadie que nos separe –dijo esto mismo con una sonrisa y de forma retante pero no entendí el porqué.

-entonces tu sabes de esa parte que he olvidado –dije casi eufórica de alegría por saber de alguien que no solo fuera parte de mi familia sabia de lo que avía echo en esa parte de mi vida que no recordaba y si era mi mejor amiga, sabia cosas que posiblemente nadie mas sabia y yo avía olvidado y la abrase aun mas fuerte de lo que lo hacíamos- gracias –dije esto último casi en susurro solo para el conocimiento de nosotras.

-Sí, eso puede ser pero el médico dijo que sería mejor que fueses recordando poco a poco, ya que los recuerdos de otras personas pueden alterar los tuyos- hablo mi madre con un tono casi de orden lo cual me disgusto –ya es hora, nos están esperando afuera tu padre, Geykan –dijo esto último tomando mi mano y asiendo énfasis en mi nombre, al parecer le molestaba el apodo con el que me llamaban aquellas chicas

-Claro -hice caso involuntariamente- pero quedan cordialmente invitadas a mi casa, supongo que vendrán a platicar con migo a pesar de lo sucedido, no es así? –Dije casi suplicante- quiero recordarlas- y por alguna extraña razón devolví mi mirada a la primera chica que seguía sin habla al escuchar que no la recordaba.

-Bueno con permiso, nos retiramos a casa –dijo mi madre con aire de desprecio hacia las chicas.

-Esa ya no es su casa y usted lo sabe mejor que nadie –dijo la chica tomando fuerza para poder decir aquellas palabra las cuales me sorprendieron y no solo a mí,

...