UN PAIS AL ALCANCE DE LOS NIÑOS, POR GABRIEL GARCIA MÁRQUEZ

Reflexiones al artículo “por un país al alcance de los niños”.

En este artículo del Nobel Colombiano podemos encontrar la síntesis de nuestra realidad, desde nuestros más remotos orígenes hasta llegar al momento actual.

Como lo plantea García Márquez, somos el fruto de un conjunto de situaciones fortuitas que gracias o por desgracia de nuestro destino en la conformación de una sociedad como la colombiana.

El autor plantea como en el momento de la invasión española, el primer elemento que perdió a nuestras aborígenes fue la codicia de los invasores europeos por las riquezas naturales de nuestra tierra, el oro, la plata, las gemas preciosas se constituyeron en la maldición que tuvieron que afrontar nuestros indios, quienes con su sangre y su vida pagaron la codicia de los europeos.

Continua García Márquez con el recorrido por nuestra historia a través de elementos como el proceso de mestizaje que vivió nuestro país y en general nuestro continente; encontramos un valioso análisis sobre la historia de segregación, racismo y violación que Colombia ha vivido desde siempre auspiciados por las élites gobernantes, la iglesia y el sistema mismo que no permite que nos reconozcamos con nuestras similitudes, y sobre todo con nuestras diferencias y nos han mantenido en una estratificación, segregación y discriminación constante, la cual nos ha llevado a la trágica confrontación que ha caracterizado a la sociedad colombiana desde su nacimiento mismo.

Nuestro país ha vivido una permanente encrucijada al buscar nuestra identidad se ha empecinado en encerrarse en las fronteras de un parroquialismo que no le deja ver más allá de sus narices y por eso se ha forjado una sociedad excluyente, con prejuicios y miedos ancestrales hacia todo lo que implique lo desconocido; sin embargo y a pesar de esos temores, también nos hemos constituido en un país que busca lo novedoso, que añora la moda, los automóviles, los viajes, lo in y lo aut de un mundo exterior al que añora pero que al mismo tiempo teme y ve con recelo.

Sin embargo estas características de los colombianos que en términos de García Márquez son de esos talentos precolombinos que nos viene también una plasticidad extraordinaria que nos viene también una plasticidad extraordinaria para asimilarnos con rapidez a cualquier medio y aprender sin dolor los oficios más disimiles.

El autor concluye su artículo haciendo una reflexión sobre el papel que le corresponde jugar a la educación en la Colombia del siglo XXI, para transformar las estructuras que han perpetuado los malos en nuestra sociedad.

En palabras de García Márquez es solo o través de una educación transformadora, puesto al servicio de los niños y jóvenes como la sociedad colombiana puede aprovechar nuestros talentos, la creatividad, recursividad,

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