Liberalismo- Conservatismo

Estudios Colombianos y Latinoamericanos

Mateo Maldonado A.

Liberalismo- Conservatismo

Es claro que los postulados y principios de todas las vertientes políticas tienen un esquema de propósitos buenos en todo el sentido de la palabra. Todos los postulados propenden por el bienestar de las sociedades en general, sin discriminación alguna. También se ha demostrado a través dela experiencia que quienes dirigen y siguen cualquier postulado político desvirtúan en gran parte los postulados de su régimen. Por ejemplo la relatividad de la revolución permite toda clase de licencias y de interpretaciones, porque los elementos que integran este concepto son tan variados en calidad y cantidad, que cada quien puede hacer con ellos el engendro intelectual que mejor le plazca: revolucionario puede ser todo aquello que signifique cambio, actualidad, modernidad, violencia, desorden, mejora, progreso, ascenso, destrucción, anarquía, iconoclastia, rebeldía, clandestinidad, resentimiento….se podría seguir indefinidamente en esta enumeración. Un político Hindú decía con razón, que revolucionario es “todo aquello que signifique muchas cosas para mucha gente”. Tal vez sea esta la más pobre pero más exacta de las definiciones que puedan darse al respecto. Es decir que de la teoría a la práctica se difiere en muchos aspectos por la aplicación humana de la última que por lo regular varía de acuerdo a las personas que la ejecutan.

A raíz del inicio que se realizó con nuestros padres de la patria y más exactamente con el enfrentamiento de ideales de simón bolívar, de una parte y francisco de Paula Santander, de otra parte surge en nuestro medio el nacimiento de los partidos conservador y liberal. Es de aclarar que simón Bolívar, se encuadro como conservador, pero todos sus ideales, proyectos, y realizaciones que ejecuto íntegramente tuvieron un tinte eminentemente liberal. Por el contrario Francisco de Paula Santander, creador en nuestro medio del liberalismo, todos sus ideales y demás proyecciones que ejecutó fueron conservadoras, a quien se le conoció como el hombre de las leyes.

El conservatismo tiene principios, postulados e ideales enfocados al bienestar social y en procura de una seguridad con reglas precisas, que como su nombre lo indica propende por el orden en todos los aspectos sociales, políticos, económicos, culturales, religiosos, etc. Algunas de estas normas resultan demasiado duras y recriminatorias en las sociedades, sobre todo cuando estas entran en decadencia, cuando el signo dominante de la sociedad es una solidaridad cómplice de la gente contra los postulados.

Aspirar al predominio político de las ideas que uno profesa es un objetivo lisito y probablemente necesario de cualquier partido político. EL conservatismo dice que eso no es sectarismo sino convicción (carta al director del tiempo, del 29 de marzo de 1972 enviada por Álvaro Gómez Hurtado). El conservatismo pregona el querer hacer reconstruir la esperanza política, agregando que naturalmente para ellos exige no solo una formulación clara de objetivos de desarrollo rotundos. Sino una revisión de métodos y de criterios establecidos que no sean compatibles con el propósito de esta recuperación. Espíritus reformistas negativos han impedido la presentación de grandes propósitos, por ello los conservadores siempre pregonan la conservación o la reconstrucción de los ideales que predican.

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