ONEMI

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LA OFICINA NACIONAL DE EMERGENCIA DEL MINISTERIO DEL INTERIOR Y SEGURIDAD PÚBLICA Y SU EVENTUAL ROL DIRECTIVO EN LA GESTIÓN DE RIESGO DE DESASTRES Y REDUCCIÓN DE RIESGO DE DESASTRES.

Mayor (Ejército de Chile) JOHN WHITNEY BARRIENTOS

Resumen:   Dentro de la experiencia en la definición de la participación de los distintos actores sociales referente a las diferentes catástrofes que han asolado a nuestro país, la importancia de asimilar las distintas capacidades de las instituciones armadas, del conocimiento del personal del sistema de Salud, entre otras, con un solo objetivo final, el brindar un apoyo holístico a la población afectada, generando condiciones óptimas en todas las fases del apoyo, sin embargo  con una dirección central, con la finalidad de distribuir los recursos humanos y materiales de las distintas organizaciones que toman parte de la gestión de riesgo de desastres y su redacción, variando la misión propia de la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública (ONEMI).

La Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública

Viendo la necesidad de contar con una organización que coordine y genere la planificación de los recursos humanos y materiales en el mes de marzo del año 1974 nace a la vida pública la Oficina Nacional de Emergencia dependiente del Ministerio del Interior (ONEMI) a través del D.L. N° 369. Sin embargo las necesidades y requerimientos sociales, económicos, cambian algunos de los factores que inciden en escenario actual en lo referido a la gestión y a la reducción de riesgo de desastres, por lo que se hace necesaria una evaluación  y una evolución de los elementos que brindan una condicional del futuro, en especial en lo referido a la evolución del variopinto de “Marcos de Acción” que generan cambios estratégicos.

De lo previo, es menester el referirse a  ciertos textos que regulan  la cotidianeidad de algunos servicios públicos, como lo son la Constitución Política de la Republica, la Ley Orgánica Constitucional de las Bases Generales de la Administración del Estado, entre otras.

Dentro de la Ley Nº 18.575 “Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado”, indica que la administración publica esta creada para  estar al servicio de las personas, buscando de forma permanente atender las necesidades públicas en forma continua y permanente fomentando el desarrollo del país, a través de la emanación, análisis y aprobación de leyes, políticas públicas, planes programas, referentes a los distintos niveles organizacionales del Estado, desde los gobiernos locales, provinciales, regionales, además del nivel nacional.

Seguido a esto los niveles de la organización de la administración pública, mediante el artículo 24  del mismo texto legal se indica “En la organización de los Ministerios, además de las Subsecretarias y de las Secretarías Regionales Ministeriales, podrán existir sólo los niveles jerárquicos de División, Departamento, Sección y Oficina, considerando la importancia relativa y el volumen de trabajo que signifique la respectiva función.”

Lo previo indica que la importancia relativa que en 1974 se le otorgo a la Oficina Nacional de Emergencias, entregando como primer resultado en 1977 el “Plan Nacional de Emergencia” (PNE), y casi un lustro posterior a su nacimiento en  el mes de abril del año 1983 y mediante el Decreto 509  se aprueba el Reglamento para la aplicación del decreto Nº 369 de 1974, es decir casi 10 años para que legalmente fuese puesta en movimiento, tiempo en el que las necesidades de seguridad y de calidad de vida se vieron modificadas.

Lo anterior, basado en el Articulo Nº 1 de la Carta Magna donde se indica “….El Estado reconoce y ampara a los grupos intermedios a través de los cuales se organiza y estructura la sociedad y les garantiza la adecuada autonomía para cumplir sus propios fines específicos.

     El Estado está al servicio de la persona humana y su finalidad es promover el bien común, para lo cual debe contribuir a crear las condiciones sociales que permitan a todos y a cada uno de los integrantes de la comunidad nacional su mayor realización espiritual y material posible, con pleno respeto a los derechos y garantías que esta Constitución establece.

     Es deber del Estado resguardar la seguridad nacional, dar protección a la población y a la familia, propender al fortalecimiento de ésta, promover la integración armónica de todos los sectores de la Nación y asegurar el derecho de las personas a participar con igualdad de oportunidades en la vida nacional….”

Claramente, se expresa a través de la carta fundamental y en la Ley Nº 18.575 “Ley Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado”, se establecen los roles del Estado frente a situaciones de emergencias, poniendo ante todo, el bienestar de las personas, por ende se debe da una importancia gravitante para la definición de programas referidos a la gestión y la reducción de riesgos y desastres, además de dar un rol acorde a los tiempos que se viven en la actualidad.

¿Existe una necesidad en cuanto al direccionamiento de las funciones y misiones relativas a la Gestión de Riesgo de Desastres y la Reducción de Riesgo de Desastres a nivel nacional?

La necesidad de contar con lineamientos claros y sólidos, además de tener el respaldo de quien debe generarlos como lo es el Ministerio del Interior y Seguridad Pública, entendiendo que es el ministerio que convoca las voluntades de todos los sectores públicos, y con ello atraer a los actores del sector privado. De esto se decanta, la necesidad de contar con diversos instrumentos para poder hacer partícipes a las partes de las bases sociales  de todos los sectores, tales como ONG tanto nacionales como internacionales, mesas de expertos a través de universidades, organismos técnicos, entre otros.

Lo esencial es ver la implementación respecto al Marco de Acción de Sendai (a lo menos hasta el año 2030) con sus 4 prioridades de acción, como lo son:

Se ha evidenciado en los últimos años, la necesidad de establecer un rol diferente para quienes son los encargados de la reducción del riesgo de desastres, en aspectos que son transversales a todos los sectores de la sociedad, logrando traspasar los papeles nacionales llegando inclusive a ser y brindar aportes  a los niveles subregionales, continentales y eventualmente mundiales, sin perder de vista que se debe a su pueblo.

Es aquí donde podría establecer una metamorfosis referente a las necesidades, y definir ciertos criterios para poder continuar.

Definiciones y enfoques asociados a la GRD y RRD

Como es de conocimiento público, el vocabulario genera realidades, por lo tanto debemos poner en contexto algunos conceptos para los lectores:

• Desastre: Un desastre comprende un contexto y proceso social que se desencadena como resultado de la manifestación e impacto de un fenómeno físico de origen natural, socio-natural o antropogénico que, al encontrar condiciones propicias de vulnerabilidad en una población y debilidad, fragilidad o falta de resiliencia en su estructura productiva e infraestructura, causa alteraciones intensas, graves y extendidas en las condiciones normales de funcionamiento de la sociedad afectada, las cuales no pueden ser enfrentadas o resueltas de manera autónoma utilizando los recursos disponibles por esta unidad social. Estas alteraciones están representadas de forma diversa y diferenciada, entre otras cosas, por la pérdida de vida y salud de la población; la destrucción, pérdida o inutilización total o parcial de bienes, producción y formas productivas de la colectividad y de los individuos, así como daños severos en el ambiente, requiriendo de una respuesta inmediata de las autoridades y de la población para atender a los afectados y reestablecer umbrales aceptables de bienestar y oportunidades de vida.^[1]

• Crisis: situación que afecta la vida normal, alterando el estado de normalidad, y que necesita recursos ajenos para poder dar solución.

• Ciclo del Desastre: Es un sistema organizacional, para establecer un ordenamiento coordinado y sistemático, en el cual se cuentan siete etapas, dentro de las cuales encontramos:
  

• Prevención: momento primordial, dentro de la planificación  de la GRD y RRD, considerando que se debe tener antecedentes respecto a las amenazas que se tienen respecto al entorno.
• Mitigación: punto esencial, donde todos los actores sociales (públicos y privados) preparan políticas públicas –entendiendo la realidad que se vive, sumado a las deficiencias existentes- para mitigar los efectos.
• Preparación: en este punto es donde se ha puesto en práctica lo evidenciado y planificado en la fase “Antes” del desastre.
• Alerta: este es el momento donde se establecen los sistemas de alerta temprana, esto sumado a la planificación del conductor político, en referencia a las organizaciones armadas de la república, además de los entes ministeriales que brindan el bienestar al ciudadano.
• Respuesta: Es en este punto, donde los organismos técnicos, ponen en funcionamiento los equipos humanos y materiales para enfrentar las situaciones en sus correspondientes niveles de criticidad, tratando de no traspasar al ciudadano común la responsabilidad de enfrentarlas sin una preparación.
• Rehabilitación: momento donde el evento adverso ha culminado, sin embargo sus estragos se encuentran presentes en todas sus formas y sentidos, en relación a todos los factores humanos como lo son: materiales (–servicios básicos-, destrucción de domicilios, fuentes laborales), y los propios de las personas (físicas y psicológicas).
• Reconstrucción: Última fase del ciclo, donde se ha pasado por todas las etapas de los eventos adversos, con apoyo de los distintos actores sociales (públicos y privados), logran poner en pie la infraestructura social.

• Fases de un desastre: Dentro de las etapas de los desastres encontramos 3, las cuales son:

• Antes, cuando se tiene un período de calma o alerta, según el evento adverso que se esté analizando.
• Durante, etapa que puede durar lapsos de tiempo muy cortos o muy prolongados, en función de las características de impacto del fenómeno.
• Después, período en el cual se realizan actividades para recuperarse de las consecuencias del desastre, que pueden ser a corto, medio o largo plazo.

• Gobernanza: Capacidad de autogobierno de cada estado, con la participación de todos los actores sociales del mismo.

• Gobernabilidad: Capacidad de conducción política de uno o más estados (en referencia a los estados federados), brindando las condiciones de realización democrática, referentes a su capacidad de ser gobernado.

• Acuerdos supranacionales:  Se refiere a los acuerdos asumidos por más de un país, nación o estado, referidos en un área en específico, sin embargo puede abarcar uno o más temas en lo general.

Dentro de los enfoques tomaremos como referente el trabajo de Abraham Maslow, donde en su trabajo referente a las necesidades humanas indica 7 niveles, como lo son:

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