Sociedad de consumo: verdades incomodas y reciclaje de mentiras

SOCIEDAD DE CONSUMO: VERDADES INCOMODAS Y RECICLAJE DE MENTIRAS

 Ética profesional

Los capítulos vistos con anterioridad nos muestran una visión critica sobre la falta de ética en las industrias, como esto afecta a las empresas, profesionales y consumidores involucrados. Aquí entra en juego la deliberación ética sobre la producción, el consumo y el reciclaje de los productos.

En el capitulo de “Verdades incomodas” habla sobre los mobiliarios, lo útiles y necesarios que son en nuestros hogares y que lamentablemente en los últimos años han acabado con la vida de niños pequeños por aplastamiento, teniendo un grado de responsabilidad los fabricantes de mobiliarios desechables como IKEA ya que no ofrecen productos seguros que cumplan con las normas de seguridad.

De igual manera se cuestiona la ética de las empresas, ya que vemos como se prioriza el bienestar económico de la empresa sobre el bienestar del consumidor, aún sabiendo que se encuentran en juego la vida de personas que se pueden ver afectadas, se hace visible también la ética profesional de quienes vigilan a estas empresas debido a la falta de normas de seguridad para estos grandes fabricantes de mobiliarios que no solo venden este tipo de productos defectuosos si no que también realizan actos ilegales que atentan contra el medio ambiente alrededor del mundo.

Asimismo, en el capitulo de “reciclaje de mentiras” podemos observar principalmente como los productores de plástico han desviado la atención de la gente dejándonos la responsabilidad de consumir menos plástico, de reciclar, cuando  estas medidas y el consumo de marcas sustentables a pesar de que hacen la diferencia, no son suficientes, en la ética como consumidor debemos analizar nuestro entorno, disminuir el consumo de plástico ya que es el material que más daño le causa al medio ambiente, que persiste a través de los años y su acumulación tiene una gran influencia negativa que causa daños a los entornos naturales y a los seres humanos. Es así donde entra la ética de las grandes industrias que no dimensionan la gravedad de la generación de altos volúmenes de plástico, situación que, si no disminuye cuanto antes, tendrá consecuencias más graves y no tendremos un futuro que brindarles a las futuras generaciones.

Finalmente, la invitación es a reflexionar sobre la ausencia de la ética en las empresas que actúen con responsabilidad y transparencia en sus procesos, en el consumidor y en el reciclaje de los productos, la ética es un valor fundamental que influye en cualquier ámbito en la sociedad y no debe ser comprometida en beneficios propios, es momento como sociedad de abrir los ojos, hacer un cambio de actitud, tomar consciencia del mundo que nos rodea para construir un mundo más sostenible para las poblaciones futuras.

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