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Biografia


Enviado por   •  1 de Septiembre de 2013  •  2.314 Palabras (10 Páginas)  •  261 Visitas

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Autobiografía

Mi nombre es Rodrigo Javier Méndez Catalán, nací el 23 de Enero de 1995 en la Clínica Dávila. Mi padre se llama Ricardo Antonio Méndez Medina y mi madre Ana María Catalán Urrutia, también tengo un hermano mayor, de 22 años llamado Ignacio Andrés Méndez Catalán. Agradecidamente fui un hijo deseado, ya que mi hermano Ignacio a la edad de 4 años quería tener un hermano para molestar, mientras que mis padres querían tener otro hijo, preferentemente una “niñita” para tener la parejita de hijos (menos mal que no fue así, ya que me hubieran llamado “Anette”). Siempre he vivido en Maipú, en la calle Guinea, número 3482, Villa Las Parcelas. Mi madre es dueña de casa y mi padre trabaja actualmente en el área de remuneraciones de Mall Plaza, mientras que mi hermano está cursando el quinto año de la carrera de Ingeniería Comercial.

Gracias a mis padres y a un silabario, a la edad de 3 años aprendí a leer y escribir, lo que me sirvió mucho para los primeros años de educación que tuve. A los 4 años entre a Pre-Kínder al Colegio Verde Valle, ya que me quedaba a una cuadra de mi casa, pero la educación no era muy buena, por lo que al mes de haber entrado a ese colegio me cambiaron al colegio Holanda donde estuve en mi edad de 4 años en Pre-Kínder y a los 5 años en Kínder. Ese mismo año, postule al Liceo Ruiz Tagle, el cual era un liceo católico ubicado en Estación Central, (Liceo donde estuve hasta Cuarto Medio) para cursar Primero Básico, en este liceo también iba mi hermano, por esa razón mis padres decidieron inscribirme ahí, y gracias a que ya sabía leer y escribir, la prueba de selección no me fue difícil y logre entrar con facilidad. A la edad de 6 años entré al Liceo Ruiz Tagle, aún recuerdo mi primer día de clases en donde estaba con mi uniforme, el cual consistía en un vestón negro, camisa blanca, corbata, del Liceo obviamente, pantalón gris y zapatos, listo y preparado para entrar a la sala con un montón de otros niños, que estaban muy tímidos y la profesora jefe lista para empezar a realizar su trabajo. Con respecto a mi educación escolar básica tengo pocos recuerdos, la mayoría son anécdotas que pase con mis compañeros y amigos de curso, en los cuales fui a paseos a la piscina, a la nieve y a otros lugares. Cabe recalcar que dentro de toda mi educación básica fui el primero del curso de Primero a Octavo Básico.

Mientras cursaba mi educación escolar básica, también realizaba otras actividades los días que tenia libre, como el sábado y el domingo. A los 12 años pasé una de las penas mas grandes de mi vida, ya que falleció mi abuelo de parte materna, de una trombosis que le dio y muchos infartos cerebrales que sufrió, todo por causa de la diabetes que tenía, mi abuelo era el pilar de mi familia en general. En esa instancia iba en Sexto Básico de mi Liceo, en ese mismo año empecé a participar en la Parroquia San Francisco de Los Pajaritos, específicamente en catequesis, para luego a los 12 años hacer mi Primera Comunión, momento muy emotivo para mí y para mi familia. Dentro de esos años participé también en la Escuela de Fútbol de la Escuela de Investigaciones, donde el equipo se llamaba “Los Sabuesos” y participaba con muchos compañeros de mi liceo. A los 13 años, mientras cursaba Octavo Básico en mi Liceo, quería seguir participando en la parroquia por lo que entre a pre-juvenil, un grupo de jóvenes (parecido a catequesis) en donde se debatían temas de actualidad y religión. En esa época fueron mis “años mozos” ya que era donde pasaba en fiestas y me encantaba conocer gente nueva. Al final de ese año fue mi graduación de Octavo Básico, donde mis padres estaban muy orgullosos por la medalla que me dieron de primer lugar en el Liceo, para luego celebrar junto a mis compañeros en una fiesta de graduación. A los 14 años entre a la Educación Media y mi familia, el colegio y mis amigos me habían comentado que de ahora tenía que tomar con más responsabilidad el Liceo ya que mis notas me iban a servir para decidir mi futuro, todo esto me lo decían porque mi hermano ese año había rendido la PSU y quedó en la Facultad de Economía y Negocios en Ingeniería Comercial, con el transcurso del tiempo él me contaba de que trataba la carrera y desde ahí que vi las primeras luces para decidir mi futuro. Por casualidades de la vida, ese año conocí, un Día de San Valentín a la persona que más ha influido en mi vida, la mujer que considero la más importante, ya que me ha hecho crecer como persona y la que es actualmente mi polola; ella se llama María José Núñez Lillo, ese año estuve con ella 6 meses, de Febrero a Agosto, y terminamos por un problema de “niños chicos”. Además ese mismo año entre al proceso de confirmación en mi parroquia, el cuál duraría 3 años; este proceso fue muy importante para mí ya que conocí gente que me hacía sentir muy a gusto, y me formaron íntegramente, en conjunto con los valores que me habían inculcado mis padres y mi Liceo. Durante ese año seguí con la misma costumbre de estudio que tenía, a pesar del pololeo que estaba llevando a cabo, pero por un problema de “niños chicos” terminé con mi polola a los 6 meses de haber empezado con ella, es decir, de Febrero a Agosto. Entre tanto, en ese mes de Agosto me hice un test cutáneo, para descubrir porque me hacían mal ciertos alimentos, y desgraciadamente el resultado del test concluyó en que era alérgico a casi todos los alimentos y otras cosas, entre las que estaba, el maní, las nueces, las almendras y otros frutos secos, además de alimentos como el cacao, el pollo, el trigo, la mezcla de productos del mar, también resulté ser alérgico al pasto, al polvo, a la humedad de las ventanas, a los ácaros, a las hormigas y a las pulgas. Entre tanto en ese año, tuve un paseo formativo en mi Liceo, el cual fue ir a acampar a Rio Clarillo, y nos enseñaban elementos para la supervivencia, cosa que no prestamos mucha atención con mis compañeros y más bien fueron paseos para divertirse. Al final de ese año termine mi primer año de confirmación con un retiro espiritual de 3 días, donde pase de ser “un peregrino a un discípulo” y aprendí muchas cosas sobre la vida, además finalicé mi primer año de Educación Media donde termine con promedio 6,4. A los 15 años me acuerdo de mis vacaciones que las pase en Las Cruces en el condominio Ilimay, lugar que era muy agradable ya que tenía piscina, cancha

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