Ejemplo de autobiografía.

AUTOBIOGRAFÍA.

Mi nombre es Blanca Elena Mejía Salas, nací el 19 de noviembre del año 1999 en Guadalajara, Jalisco, México. Soy la quinta de cinco hermanos, el mayor Pablo, luego mi hermana Marina, Juan y Eduardo. Vivo con mis dos padres, Enrique Mejía y Zulema Salas. En este momento tengo 16 años y estudio la preparatoria.

Mi infancia fue muy especial, tenía muchos amigos y juguetes con los cuales me divertía mucho. Tengo recuerdos únicos que viví. Ahora puedo decir que fui una niña feliz y no me preocupaba nada.

Cuando tenía 8 años, mi hermano mayor decidió entrar a la Infantería Militar, con sólo 18 años cumplidos. Mis padres no estaban contentos pero lo dejaron. Lo veía llegar los fines de semana a casa, delgado y fuerte, muy alto, ése era mi héroe. Decidió salir y a los años después entró a la Policía Estatal de Jalisco. Sin duda, mi hermano mayor ha sido un gran apoyo para toda la familia, siempre trata de ayudar, tiene historias que no puede terminar de contarlas en una sola noche , enseñanzas, e inteligencia. Lo admiro plenamente, como a mis padres y a mis hermanos que luchan día a día rehusándose a ser invisibles.

Cuando tenía 11 años, un primo hermano tuvo un accidente en una motocicleta, quedó en coma y a los días después, murió. Una pérdida enorme en la familia Mejía. Mi padre siempre fue una figura paterna para él y para sus hermanos. Por distintas razones la familia se había separado después de vivir mucho tiempo juntos y cuando supimos lo que le había pasado, la familia se unió. Mis hermanos perdieron a un hermano con el que habían pasado una infancia entera y adolescencia inolvidable. Ha sido un hecho que marcó mi vida, vi a mi familia sufrir. Aprendí que no debemos esperar que suceda algo para pedir perdón por nuestros errores.

Estoy meramente orgullosa de mis padres, no han tenido una vida fácil y aun así, no se han rendido ni se rendirán, jamás. Hemos sido educados por dos excelentes personas, fuertes y seguras. Que han dado todo por nosotros y lo mejor que podemos hacer es enorgullecerlos. No se cansan de decir lo orgullosos que están de tener esta familia. Loca, gritona y rebelde, pero siempre unida.

Tengo 16 años llenos de recuerdos tontos y bellos, aprendí mucho, me enteré de cosas que no quisiera saber jamás, han pasado muchas cosas a lo largo de este tiempo. Podría hablar de mi adolescencia y lo expuestos que estamos en la sociedad. Pero apenas empiezo a descubrir cosas y que me sucedan más. Y eso es lo interesante.

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