Matruchotti

Trichomonas vaginalis

Microorganismo

Existe sólo en la forma de trofozoíto; posee cuatro flagelos libres que nacen de un solo pedículo y un quinto flagelo que forma una membrana ondulatoria.

Sólo T. vaginalis se ha establecido como patógeno, el trofozoíto de T. vaginalis es ovalado y por lo común mide 7 por 15 μm. El axostilo es una estructura que protruye y que podría mediar la fijación.

Epidemiología

Se transmite durante el coito, pero algunas infecciones pueden provenir de toallas contaminadas, equipo para limpieza íntima de la mujer, instrumentos de exploración y otros objetos (fómites).

Los neonatos pueden infectarse al pasar por el conducto uterino.

Patogenia

Es un parásito de transmisión sexual y muchas infecciones son asintomáticas

En mujeres la infección por lo común se circunscribe a:

• La vulva

• La vagina

• El cuello uterino

Las superficies mucosas pueden estar sensibles, inflamadas, erosionadas y cubiertas por una capa de secreción de color crema o amarillento, espumosa.

En los varones puede infectar

• La próstata

• Las vesículas seminales

• La uretra

Incluyen dolor local a la palpación, prurito y ardor en la vulva(en la mujer). En promedio, 10% de los varones infectados presentan una secreción uretral blanquecina y acuosa. El periodo de incubación va de cinco a 28 días.

Enfermedades

La tricomoniasis es una enfermedad de transmisión sexual que produce vaginitis con dolor, leucorrea y disuria. La infección fluctúa a lo largo de semanas o meses. Los varones por lo común cursan asintomáticos, pero pueden tener uretritis o prostatitis. La probabilidad de adquirir la enfermedad se correlaciona directamente con el número de contactos sexuales 70% entre prostitutas, parejas sexuales de pacientes infectados o individuos con otras enfermedades venéreas

El contacto directo de T. vaginalis con el epitelio escamoso del aparato genitourinario ocasiona la destrucción de las células epiteliales afectadas y el desarrollo de una reacción inflamatoria neutrofílica y hemorragia petequial. El microorganismo no es invasor y no se ha demostrado la presencia de toxinas extracelulares.

Los cambios en el pH ambiental, flora microbiana y estado hormonal de la vagina así como factores inherentes al parásito parecen

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