Productividad de un ecosistema.

Productividad de un ecosistema.

La relación que existe entre la producción y la biomasa de un ecosistema, constituye su productividad. La productividad representa la producción proporcional de un ecosistema en función de su biomasa.

Así, por ejemplo, si la biomasa de un ecosistema incrementa en un 50% en una semana, se dice que la productividad de ese ecosistema es de 50% semanal. La productividad de un ecosistema depende de la cantidad de la biomasa que tenga en un momento dado y del tiempo empleado en formarla.

Productividad en los distintos niveles tróficos.

La producción de biomasa, como medida de la productividad, no es la misma en los distintos niveles tróficos, sino que varía según las características de los organismos que forman ese nivel. De esta manera, se tienes:  

Producción de los organismos productores: De toda la energía captada por los productores mediante la fotosíntesis, cerca de 2% es transformada en biomasa. Los productores utilizan, aproximadamente, la mitad de esa biomasa en la respiración celular para obtener la energía necesaria para sus funciones vitales. El resto, que representa cerca de 1% de la energía total captada, se acumula; esto incrementa la biomasa de los productores lo cual representa, potencialmente, el alimento disponible para el siguiente nivel trófico: el de los herbívoros.

Producción de los herbívoros: De la biomasa captada por los animales herbívoros al alimentarse de los productores, aproximadamente 60% se pierde en forma de excretos, pasando directamente a los organismos descomponedores. El  40% restante es utilizado por los consumidores primarios de la siguiente manera: 30% es utilizado para sus procesos vitales, y el resto, es decir 10% de la energía del alimento ingerido, es incorporado a su biomasa, lo que constituye, potencialmente, el alimento disponible para el próximo nivel trófico: el de los carnívoros

Producción de los carnívoros. La carne es más aprovechable que los vegetales; por consiguiente, del alimento ingerido por los carnívoros, solo cerca de 30% se pierde en forma de excrementos. El 70% restante es utilizado por los carnívoros de la siguiente manera: cerca de 50% lo utilizan en los procesos vitales y el resto, es decir, 20% del alimento consumido por los carnívoros, es almacenado por estos en forma de biomasa, lo que constituye la cantidad de alimento potencialmente disponible para los depredadores de los carnívoros.

La desertificación. Es el agotamiento progresivo de la vegetación y los suelos. La desertificación da lugar a zonas áridas. Algunas de las causas físicas de la desertificación son: la desnudez del suelo por largos periodo, cambios en las características climáticas del ecosistema y la deficiente administración de los recursos por parte de los seres humanos.

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