SISTEMA DE ÁREAS PROTEGIDAS

SISTEMA DE ÁREAS PROTEGIDAS

• Áreas naturales protegidas (ANP)

A nivel mundial, Argentina fue pionera  en la creación de áreas naturales protegidas.

Los primeros pasos hacia la creación del primer Parque Nacional de la Argentina se remontan al 6 de noviembre de 1.903. Ese día Francisco Pascasio Moreno, más conocido como Perito Moreno, donó al Estado argentino…

“tres leguas cuadradas en la región situada en el límite de los territorios de Neuquén y Río Negro, en el extremo oeste del lago Nahuel Huapi, con el fin de que sea conservado como parque natural”. Las tierras habían sido el pago del Estado argentino a Moreno por sus negociaciones e intervención para lograr una resolución pacífica en el conflicto limítrofe con Chile. Su deseo fue “…Que la Nación Argentina conservara la propiedad de algunos lugares excepcionalmente hermosos para el mejor provecho de las generaciones presentes y venideras.”

Así, la Argentina se convertía en el tercer país americano en crear un parque nacional, y el quinto país del mundo en hacerlo (comparten el ranking EE.UU., Canadá, Nueva Zelanda y Australia).

• ¿Qué es un Área Natural Protegida (ANP)?

Un área protegida es un espacio del territorio que se encuentra manejado con normas que garantizan la protección de los bienes naturales,  culturales y los servicios ecosistémicos. Por otra parte, brindan soluciones naturales para la adaptación a los efectos del cambio climático.

Un ANP puede estar administrada y gestionada por diferentes organismos o individuos, como una institución pública (nacional, provincial o municipal), una empresa privada, un propietario particular, una universidad, una organización de la sociedad civil, una comunidad indígena, entre otros. Según quién la gestione, la ANP se considera privada, pública, comunitaria o de régimen mixto.

Categorías de manejo

Las categorías de manejo de las ANP se definen en base a sus objetivos de manejo. Estos pueden apuntar a la conservación estricta, la protección de un rasgo dado de la biodiversidad, el manejo del hábitat de una especie, el uso sustentable de la biodiversidad, entre otros.

En Argentina, las provincias y la Nación han definido distintas categorías de manejo a través de sus legislaciones de ANP.

A los efectos de tener un lenguaje común, durante muchos años se han realizado esfuerzos globales para establecer un esquema que sintetice las principales categorías de manejo.

Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), se reconoce que cualquier ANP podría ser clasificada según alguna de las siguientes categorías de manejo:

• Categoría I. (a) Reserva natural estricta y (b) Área natural silvestre.
• Categoría II: Parque nacional.
• Categoría III: Monumento natural.
• Categoría IV: Área de manejo de hábitats/ especies.
• Categoría V: Paisaje terrestre y marino protegido.
• Categoría VI: Área protegida manejada.

Categoría I: Protección estricta

• a) Reserva natural estricta

Conservar a escala regional, nacional o global ecosistemas, especies (presencia o agregaciones) y/o rasgos de geodiversidad extraordinarios.

Dichos atributos se han conformado principalmente o exclusivamente por fuerzas no [pic 1]humanas y se degradarían o destruirían si se viesen sometidos a cualquier impacto humano significativos. Por ejemplo: Reserva Natural Estricta San Antonio, ubicada en la provincia de Misiones.

•  b) Área natural silvestre

Proteger a largo plazo la integridad ecológica de áreas naturales no perturbadas por actividades humanas significativas, libres de infraestructuras modernas y en las que predominan las fuerzas y procesos naturales, de forma que las generaciones presentes y futuras tengan la oportunidad de experimentar dichas áreas.No hay ejemplos de esta categoría en América del Sur.Categoría II: Conservación y protección del ecosistema

[pic 2]Parque Nacional Campos del Tuyú

Categoría II: Parque Nacional

Proteger la biodiversidad natural junto con la estructura ecológica subyacente y los procesos ambientales sobre los que se apoya, y promover la educación y el uso recreativo. Por ejemplo: PN Campos del Tuyú, PN El Rey. Tal vez la categoría que más reconoce la mayoría.

Categoría IiI: Monumento natural

El objetivo es proteger rasgos naturales específicos sobresalientes, la biodiversidad y los hábitats asociados a ellos. Por ejemplo: MN Ballena Franca Austral, MN Huemul.

Categoría IV: Área de manejo de hábitats / especies

Mantener, conservar y restaurar especies y hábitats. En conservación, se le dice “manejo” a las tareas generalmente efectuadas por  guardaparques, que se disponen a restaurar o mantener condiciones ambientales específicas. Por ejemplo: regular la cantidad de agua de un espejo de agua en un humedal, controlar que no crezcan arbustos en una pradera, etc.

Categoría V: Paisaje terrestre y marino protegido

Se crean para proteger y mantener paisajes terrestres/ marinos importantes y para la conservación de la naturaleza asociada a ellos, así como otros valores creados por las interacciones con los seres humanos mediante prácticas de manejo tradicionales. Se prioriza la conservación de valores escénicos, culturales e históricos, sobre los de la biodiversidad. Por ejemplo un lugar donde se realizaban o realizan rituales mapuches o incas.

Categoría VI: Área protegida manejada

Proteger los ecosistemas naturales y usar los recursos naturales de forma sostenible, cuando la conservación y el uso sostenible puedan beneficiarse mutuamente. Por ejemplo Reserva Nacional Pizarro en la provincia de Salta.La Argentina no cuenta con un sistema jurídico-institucional unificado en materia de Áreas Protegidas (AP), siendo un sistema descentralizado, con falta de integración y planificación entre nación y provincias. Actualmente para mejorar esta falta de integración federal, se ha realizado una concertación multi-jurisdiccional en materia de AP.

En el año 2003 se firmó un convenio tripartito –Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable (SAyDS), la Administración de Parques Nacionales (APN) y el Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA)– para la constitución del llamado Sistema Federal de Áreas Protegidas (SIFAP).

De esta manera, el SIFAP comprende todas las AP del país creadas y administradas por organismos nacionales, provinciales, municipales, universitarios, privados, ONG o fundaciones.

Establece en su Marco Estatutario, que “las Áreas Protegidas son zona de ecosistemas continentales (terrestres o acuáticos) o costeros/ marinos, o una combinación de los mismos, con límites definidos y bajo algún tipo de protección legal, nacional o provincial, que las autoridades competentes de las diferentes jurisdicciones inscriban voluntariamente en el mismo, sin que ello, de modo alguno, signifique una afectación al poder jurisdiccional”.

• ¿Por qué es importante conservar estas áreas?

En 1994 Argentina ratificó el Convenio sobre de Diversidad Biológica (CDB).  La meta Aichi (meta número 11) está relacionada directamente con las Áreas Protegidas y plantea que, para el año 2020, al menos el 17% de las zonas terrestres y de aguas interiores y el 10% de las zonas marinas y costeras; especialmente las que revisten particular importancia para la diversidad biológica y los ecosistemas; sean conservadas por medio de sistemas de Áreas Protegidas administrados de manera eficaz y equitativa.

Hoy en día existen 492 Áreas Protegidas con una superficie de 35.691.705 hectáreas, lo cual representa el 12.80 % del territorio nacional (Datos actualizados a diciembre 2018).

Paralelamente, las áreas costeras y marinas con algún grado de protección representan un 4%.   De las 54 áreas protegidas costero-marinas en nuestro país, menos del 15% cuenta con planes de manejo vigentes, y más del 80% no tiene los recursos suficientes para cumplir con sus objetivos básicos de conservación.

Por otra parte, las áreas protegidas que existen no siempre se encuentran bien implementadas: con déficit de presupuesto, recursos humanos o planes de manejo. En la Argentina, sólo el 8% de la superficie continental se encuentra protegida. A la vez, sólo un 20% de estas áreas protegidas se encuentra con un nivel aceptable de manejo. Además, el nivel de protección no es parejo en todas las ecorregiones del país y algunas ecorregiones están gravemente desprotegidas: el 35% de los Bosques andino-patagónicos están protegidos, pero sólo el 1% del Pastizal Pampeano cuenta con protección; y valiosas regiones como el Chaco húmedo y del Mar Argentino no alcanzan una protección del 5%.

...