Silala

EL SILALA

Los intentos del presidente de Bolivia, Evo Morales, por hacer valer los derechos de su país sobre las aguas del Silala se volvieron en su contra luego de que la oposición se negara durante sus años como activista y su campaña presidencial.

Morales defendió la soberanía de los recursos naturales de Bolivia con el argumento de que pertenecían a los ciudadanos del país y que todas las empresas privadas que obtuvieran ingresos por su explotación debían pagar por ellos.

Criticó fuertemente a la oposición por "regalar" los recursos a través de contratos de concesión y defendió el derecho de Bolivia a nacionalizar los recursos hídricos, mineros y de gas. apoyar un acuerdo preliminar alcanzado entre funcionarios de gobierno de Chile y Bolivia.

El preacuerdo estipula que Chile pagará por el 50% de las aguas del Silala que use, mientras se realizan estudios más detallados para determinar si el Silala es un río o un manantial.

Los estudios establecerán si Chile debe pagar por un porcentaje adicional de las aguas, lo que podría llegar a 50%, indicó el funcionario de la Cancillería chilena .Si bien muchos comprenden la importancia de los recursos hídricos, las cuestiones que están en juego aquí son mucho más complejas de lo que parecen a simple vista. Los principales problemas políticos de Bolivia en la última década fueron provocados por discusiones en torno al agua. La llamada "guerra del agua" en el departamento de Cochabamba en el 2000 fue el comienzo de un conflicto político que duró cinco años y que finalmente culminó con la elección del primer presidente indígena del país: Evo Morales.

Los intentos del presidente de Bolivia, Evo Morales, por hacer valer los derechos de su país sobre las aguas del Silala se volvieron en su contra luego de que la oposición se negara a apoyar un acuerdo preliminar alcanzado entre funcionarios de gobierno de Chile y Bolivia.

Esto podría retrasar la firma de un preacuerdo entre Morales y la presidenta chilena, Michelle Bachelet, dijo a un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile.

Ambos países han venido debatiendo durante décadas sobre los derechos de Chile para usar las aguas del Silala. Las autoridades chilenas han sostenido que el Silala es un río internacional debido al curso que sigue y que, por lo tanto, su uso está regido por el derecho internacional. Bolivia, por su parte, ha insistido en que las aguas nacen en 94 manantiales en su territorio, los que no se rigen por el derecho internacional.

El valor real de esta agua se ha elevado enormemente en los últimos años, pues se ha vuelto fundamental para las mineras que operan en el norte de Chile, mientras funcionarios bolivianos reclaman que esto deja a sus propios ciudadanos y a las actividades productivas en el departamento de Potosí sin agua suficiente.

Morales

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