Antecedentes Historicos De Derechos Sociales

ANTECEDENTES HISTORICOS DE DERECHOS SOCIALES

Los que participamos en las luchas políticas, económicas y sociales de 20 años a la fecha, percibimos con total nitidez, que desde el inicio de las luchas históricas y de la actualidad, los pobres de este país como clases y fuerzas productivas de obreros, campesinos e indígenas como vanguardia permanente, y las clases de profesionistas e intelectuales, identificados con amas de casa, artesanos, vendedores ambulantes, estudiantes y desocupados en convergencia con los tres primeros sectores, hemos empezado en este nuevo milenio a crear, más que demandar una nueva Nación.

La caída del sistema (electoral del 88), la permanente ocultación o abultamiento de resultados electorales a la fecha, antes y después de 78 años priístas, de los cuales los últimos 13 años en contubernio con el PAN, y de la permanente traición e inconsecuencias de las izquierdas (siniestras) han permitido una constante y permanente represión del pueblo, por lo que las Constituciones anteriores a la de 1917, de la cual se deriva la actual, y como común denominador antes y después del 17, ambas Constituciones son trasgredidas en todos sus preceptos sociales, lo que hace evidente se empalmen en la visión social del pasado y el presente, en la continuidad de las luchas por un nuevo proyecto de nación, que sustente fundamentalmente en el Derecho Social, ha sido una constante que, en todos los momentos de crisis del país, así como del resto de la humanidad, exista la necesidad de establecer posiciones de derechos sociales primero, posiciones de derechos políticos después, y posiciones de derechos jurídicos al final, para el amplio desarrollo de la conciencia social de transformar el Estado, secuestrado no solo por un solo partido político, como se nos machaca (pensaba), lo que clarifica que la“alternancia” es una sola clase política empresarial, hoy totalmente Palacio (burguesía política) en el poder antes y después del PRI.

Las actuales circunstancias nacionales, son en extremo difícil para todos y cada uno de nosotros; en consecuencia la tarea, que nos plantean las actuales fuerzas productivas es grande y llena de responsabilidad. Se trata nada menos que de sacar al país de la peor crisis política, económica y social de su historia reciente, es decir, se trata de sacarlo de la confusión y hacerlo encontrar el camino del desarrollo integral. La historia de la Nación Mexicana, ha ido aparejada permanentemente de la demanda social de derechos sociales, en estos parámetros el actual sistema que nos rige como Nación, contiene los mismos agentes antisociales que el México de la Colonia, de Independencia, de Reforma y de la Revolución, enquistados en su forma más rústica de expoliación en el Porfiriano histórico, y aplicado en el presente ciclo de clonación llamado“neoliberal globalizador”, o lo que es lo mismo, capitalismo depredador en su forma más refinada y acabada, ahora con su matriz violada y violentada en el ex“World Trade Center”.

Por lo anterior, la única manera de tener éxito, es encontrar una meta capaz de unir las voluntades de todos los pobres, y trabajar con las principales fuerzas progresistas y productivas, creadoras de riquezas en éste país, para lograr ejercer democráticamente el verdadero cambio, que la nación demanda por medio y mandato directo del pueblo, único dueño soberano de la nación mexicana. Las experiencias históricas indican y demuestran que la tesis fundamental de cambio en México es la social, y no la de los privilegiados, ni de la gente del capital. Se tiene que recordar que iniciamos un movimiento social contra la injusticia, la pobreza, la mala distribución de la riqueza, el descontento generalizado y la arbitrariedad, todo violatorio y nugatorio de los derechos sociales, por lo tanto, de los derechos laborales en todos sus conceptos y formas.

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