Juan Rojo

Juan Rojo, Ortuno y Flores parecen sorprendido por la furia del pueblo contra el comendador, este se muestra incrédulo ante lo que dicen, mientras que Fondroso afirma lo dicho, se escucha a Mengo gritar expresando su odia contra los “traidores”, Flores le ruega al comendador que se valla pues el pueblo no se ira hasta tomar venganza, pero el comendador no escucha, pues cree que al defenderse con armas esta fuera de peligro.

Frondoso y Estaban exigen justicia gritando el nombre de Fuenteovejuna, mientras que el comendador se muestra desconcertado, le pide al pueblo calma que lo escuchen pues él, es el señor, sin en embargo el pueblo no escucha esta cegado por odio ante las injusticia que el comendador realizo, exclaman el nombre de Fuenteovejuna sin parar y la muerte de Fernán Gómez.

Las mujeres armadas entran en escena dialogando una con otra, pero Esteban no pierde el tiempo exigiendo la muerte del traidor, el comendador pide piedad ante su obvio destino pues está muriendo. El regidor y Esteban entablan plática, pues las armas habían llegado, sin tomar mucha importancia de este hecho, se entusiasman por haber cumplido su objetivo haber matado al comendador y ahora aclaman a los reyes católicos.

Las armas ya habían llegado, anuncio el regidor y Estaban tomando el mando ordeno que fueron colocadas en el ayuntamiento, a lo que hiso caso Juan Rojo,  sin embargo, aún hay un problema que atender todos estaban seguros que aunque esta victorias era celebrada con tanta euforia, algo era seguro, los reyes querrían investigar la muerte del comendador, a lo que ideo un plan y aviso a los demás, que no importara cuanto los presionaran, siempre tendrían que contestar que el autor del asesinato sería la Fuenteovejuna, todos estuvieron de acuerdo y para confirmar lo acordado Esteban hiso un simulacro de los actos que se avecinaban con Mengo, el cual siguió las instrucciones a la perfección.

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